MADRID. El rey Felipe VI y la reina Letizia, acompañados por sus dos hijas, comenzaron el recorrido por las calles de Madrid que finalizará en el Palacio Real.
La Familia Real hace este recorrido en dos vehículos, el primero de ellos un Rolls Royce descapotable, y que va ocupado por los reyes, y un segundo en el que van sus dos hijas, la princesa de Asturias, Leonor, y la infanta Sofía.
Miles de personas, entre ellos muchos turistas, agitan banderas al paso de la comitiva real, en una jornada soleada y calurosa en Madrid, engalanada con banderas y flores para el día histórico en España.
Tras abandonar el Congreso, donde Felipe VI ha prestado juramento, la Familia Real se dirige hacia la Plaza de Oriente para saludar al pueblo español desde el balcón central del Palacio de Oriente, un edificio histórico empleado únicamente en actos oficiales, pero no como residencia.
El Rey saluda en el trayecto, de pie, en el vehículo descapotable escoltado por un desfile de caballos de la Guardia Real.
En muchos lugares del desfile se pueden ver en primera fila a niños subidos a los hombros de sus padres ataviados con gorras, algunas con los colores de la bandera nacional, así como gente encaramada en ventanas y farolas.
Casi siete mil agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado se han desplegado en Madrid para que todo discurra sin incidentes.
Madrid y sus alrededores están blindados desde el aire, en las azoteas, en el subsuelo y a pie de calle, lugares en los que agentes de ambos cuerpos controlan la seguridad, tanto en los alrededores del Congreso y el Palacio Real, sedes de los actos principales, como durante el recorrido de la comitiva real.
Los nuevos reyes ofrecerán posteriormente una recepción en el Palacio a más de dos mil invitados, representantes de todos los sectores de la sociedad.