JERUSALÉN. Un adolescente israelí y dos jóvenes palestinos murieron en las últimas veinticuatro horas en dos sucesos separados registrados en la meseta del Golán y en Cisjordania en el marco de los allanamientos que vienen realizando en ciudades palestinas desde hace nueve días para encontrar a tres adolescentes israelíes secuestrados hace una semana en Cisjordania. Las muertes hicieron crecer la tensión en la región.

 

El israelí, de 13 años, falleció y tres civiles resultaron heridos, entre ellos su padre, como consecuencia del impacto antes del mediodía de un proyectil disparado desde Siria contra un vehículo civil en la meseta del Golán, de acuerdo a fuentes militares.

 

El suceso se produjo cuando las cuatro víctimas se encontraban cerca de la verja fronteriza, en una zona conocida como Tel Hezka, y hasta la fecha es el incidente más grave registrado en la zona desde que comenzó la guerra civil en Siria en 2011.

 

El Ejército israelí, que considera que no se trató de un acto fortuito sino de un disparo intencionado, respondió con fuego de artillería contra la zona de la que provino el obús.

 

“No ha sido un proyectil errante como otras veces, sino un ataque deliberado contra un vehículo civil, no sabemos aún si fue un mortero, un cohete o un proyectil de tanque, pero cruzó la zona de este a oeste e impactó en el automóvil”, aseguró el teniente coronel Peter Lerner.

 

El vehículo se encontraba junto a una divisoria levantada por Israel en el Golán, territorio que ocupa desde 1967 y que en los últimos tres años ha sido blanco de ataques, en muchos casos de balas o proyectiles perdidos relacionados con el conflicto armado en el país vecino.

 

El suceso coincide con una espiral de tensión en la zona por el presunto secuestro de tres adolescentes israelíes en un cruce de Cisjordania hace más de una semana, que ha provocado los arrestos masivos de más de 300 palestinos y la muerte de cinco en choques con fuerzas israelíes que participan en la operación de búsqueda.

 

Los últimos dos palestinos fallecidos se registraron en las últimas redadas nocturnas, que causaron además once heridos, en los distritos cisjordanos de Nablus y Ramala.

 

La operación de búsqueda es la de mayor envergadura llevada a cabo por Israel en Cisjordania desde la conocida como Muro de Defensa en 2002, y se inició tras la desaparición de tres estudiantes de un seminario rabínico en el bloque de colonias judías de Gush Etzión.

 

Israel ha acusado a Hamás de su secuestro, aunque desde entonces no se tiene ninguna pista más allá de la llamada de uno de los desaparecidos informando entre susurros a la Policía de que estaba siendo secuestrado.

 

Un oficial israelí que participa en la búsqueda dijo al medio “Ynet” que unos 350 palestinos han sido arrestados desde el comienzo de la operación, en la que se han inspeccionado mil 300 viviendas.

 

En los últimos nueve días milicianos palestinos han disparado veinte cohetes, y la Fuerza Aérea de Israel ha atacado posiciones en Gaza, sobre todo instalaciones de los brazos armados de Hamás y la Yihad Islámica.