La Gendarmería comenzará a operar a finales de julio con cinco mil agentes, aunque el número aumentará de manera paulatina, con el objetivo de proteger los ciclos productivos amenazados por el crimen organizado.
El titular de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), Monte Alejandro Rubido indicó que antes de que finalice julio estará en marcha la nueva corporación, que será una división de la Policía Federal integrada en una primera etapa con cinco mil agentes civiles.
En un encuentro con corresponsales extranjeros desde el centro de inteligencia de la CNS, explicó que los gendarmes pasaron por un “proceso muy intenso de depuración”.
De un 106 mil jóvenes interesados, 22 mil fueron sometidos a exámenes de control de confianza y los mejores fueron capacitados en instalaciones civiles y militares, apuntó.
Además, en el proceso de formación participaron expertos de Colombia, España, Estados Unidos y Francia, afirmó Rubido desde una sala de mando dotada de tecnología de última generación y un teléfono rojo para que el presidente se reúna con su gabinete de seguridad en caso de emergencia nacional.
El nuevo cuerpo estará enfocado en la protección de “las cadenas de producción” que puedan estar en riesgo por la presencia de los grupos criminales, como en el caso del limón en el estado de Michoacán.
El objetivo es que si la producción de tomate en Sinaloa o la caña de azúcar en el sur de Tamaulipas está amenazada por el crimen, la Gendarmería apoye a los agricultores en las diferentes etapas del ciclo, como la recolección, el traslado y la comercialización.
El comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo explicó que se trata de un “cambio de paradigma” con el que buscan cubrir un hueco que permitía a los cárteles alterar ciclos productivos, generar desempleo y obligar a muchos a trabajar para los grupos criminales.
En ese sentido, precisó que se creará un consejo de cámaras empresariales para abordar de forma permanente cuáles son las actividades productivas que están en riesgo.
Sobre la ampliación del número de miembros de la Gendarmería, Galindo dijo que ya están trabajando en la selección de los agentes de la segunda etapa, que prevé elevar a 10 mil los integrantes de este cuerpo, aunque la cifra puede crecer dependiendo de las necesidades.
México sufre una ola de violencia que, desde fines de 2006, ha causado más de 75 mil muertos, en su mayoría por acciones de los cárteles de la droga y otros grupos del crimen organizado.
Desde la Administración anterior, encabezada por Felipe Calderón (2006-2012), el Ejército y la Marina asumieron tareas de seguridad en varias regiones del país, al verse desbordados los cuerpos de seguridad locales.
La creación de la Gendarmería fue uno de los compromisos más visibles en materia de seguridad pública que asumió el presidente Enrique Peña Nieto desde que llegó al poder, el 1 de diciembre de 2012.
También prometió el retorno gradual de los militares a los cuarteles en la medida en que disminuya la violencia del crimen organizado, así como concentrar su actuación en las zonas más críticas, algo que este año ha hecho en los estados de Michoacán y Tamaulipas.