WASHINGTON. El Departamento de Justicia (DOJ) de Estados Unidos y la Procuraduría General de la República (PGR) de México crearon hoy un grupo de trabajo de alto nivel en respuesta a la situación humanitaria de los niños migrantes sin acompañantes.
El procurador mexicano Jesús Murillo Karam señaló que el nuevo mecanismo de trabajo bilateral se enfocará en medidas de prevención de la migración de menores de edad, sin dejar a un lado el combate a las redes de tráfico de personas.
“Es un tema que nos preocupa a todos… Coincidimos que darle a la prevención un mayor énfasis es una primera prioridad sin que esto signifique que no se persiga a quienes viven de delinquir”, señaló en entrevista con Notimex.
El acuerdo fue alcanzado en el marco de una reunión entre Murillo Karam y el procurador general de Estados Unidos, Eric Holder. El grupo de trabajo estará encabezado por la subprocuradora mexicana Mariana Benítez y por el subprocurador estadunidense Bruce Swartz.
Murillo Karam señaló que en el tema de la migración de niños se trata de darle a la migración un sentido humano y sostuvo que para ello “es fundamental tener mayores controles de paso”.
“Lo que estamos haciendo en México es generar un plan para la frontera sur que tenga estas características, que humanice la migración, que le quite los riesgos y que la haga controlable”, señaló.
La delegación mexicana, que incluyó al procurador Murillo, a la subprocuradora Benítez y al jefe de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, Tomás Zerón, se reunió con el Comisionado de Aduanas Gil Kerlikowske y el asesor presidencial Randy Beers.
“Abordamos todas las áreas posibles de colaboración, la intensidad y la clasificación de las formas de clasificación. fue darle un orden y sentido a la relación de colaboración frente a la delincuencia organizada internacional”, explicó Murillo Karam.
Sobre el balance de la cooperación tras el establecimiento de la “ventanilla única” de coordinación, señaló que los estadunidenses reconocieron que “había mejorado mucho la colaboración en la lucha contra el narcotráfico”.
Aunque el tema de los niños migrantes ocupó la mayor atención, otros temas a discusión con las diversas agencias estadunidenses figuraron las extradiciones, el uso de la fuerza por la Patrulla Fronteriza.
“Fue una reunión muy fructífera porque se logró aclarar los aspectos en donde vemos ambos países ventanas de oportunidad para mejorar el diálogo en lo que hace las extradiciones”, explicó Benítez.
Ninguna de las partes abordó el tema específico de la eventual extradición a Estados Unidos de Joaquín “El Chapo” Guzmán”, aunque los funcionarios estadunidenses reiteraron su felicitación a México por la captura del presunto líder del Cártel de Sinaloa.
“Dejamos en claro que el interés del país de que no hubiera extradición en el caso del ‘Chapo’ hasta que no hubiera respondido por los delitos que tiene en México”, señaló Murillo Karam.
En el asunto del uso de la fuerza, el procurador dijo sentirse “muy complacido” de los procedimientos actualizados por parte de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) porque se humanizan los procedimientos y se evita el abuso de la fuerza.
El embajador de México en Washington, Eduardo Medina Mora, sostuvo que las tres reuniones fueron “extraordinariamente cordiales” y enfocadas en temas concretos.
“Hubo un reconocimiento a la actitud, determinación y compromiso del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto al combate a la delincuencia organizadas y a la construcción de mecanismos institucionales que den certidumbre a los ciudadanos de México”, señaló Medina Mora.