Luego de que medios de comunicación y afición cuestionaran Lionel Messi por dejar con la mano estirada a un niño, que lo quería saludar al salir del túnel en su primer juego de Argentina en el Mundial Brasil 2014, parece que el capitán argentino lo volvió a hacer.
Previo al duelo de hoy entre Argentina y Bélgica por el pase a la semifinal, los niños, que acompañan a los jugadores en la ceremonia de los himnos, recibieron al argentino con emoción y saludos. Y, aunque Messi respondió con una sonrisa y agitó la mano correspondiendo el gesto de los pequeños, a los únicos que saludó de mano fue a los árbitros.
Esta acción volvió a crear polémica en redes sociales, pues la afición critica la sencillez del jugador argentino.