GINEBRA. El número de personas que murieron tras contagiarse con el virus del ébola en África Occidental asciende a 518, anunció hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La agencia sanitaria de Naciones Unidas contabilizó 844 casos de infección en los tres países que hasta la fecha registran contagios: Guinea Conakry, Liberia y Sierra Leona.
El último recuento dado a conocer por la ONU el pasado 1 de julio cifraba en 467 los decesos de un total de 759 casos censados.
La OMS asegura que la actual epidemia de ébola en África Occidental es la más grave que se ha visto jamás tanto por el número de personas infectadas, como por la cantidad de fallecidos y por su distribución geográfica en tres países simultáneamente.
La agencia de la ONU asume que la epidemia no está controlada, pero a pesar de ello desaconseja cualquier restricción a los viajes o al comercio.
Sin embargo, parece que la epidemia comienza a remitir, dado que por primera vez desde que están contabilizados los casos, no se ha detectado ninguna nueva infección en Guinea Conakry, precisamente el país donde se originó el primer contagio.
En los últimos siete días, sin embargo, se registraron 16 nuevos casos en Liberia y 34 en Sierra Leona.
Ese número indica que sigue la transmisión activa en la comunidad, especificó Fadéla Chaib, portavoz de la OMS.
Chaib dijo que aún “hay resistencia entre las personas al llevar a los enfermos a los hospitales, lo que provoca que los intenten cuidar en casa con el riesgo de contagio”.
“Asimismo, a pesar de las campañas de comunicación, los ritos funerarios no cambian y muchas personas lavan y abrazan a los fallecidos por ébola, a pesar del elevado riesgo de infección que ello implica”.
La enfermedad -que se transite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados- causa hemorragias graves y puede tener una tasa de mortalidad del 90 por ciento.
La OMS activó el Global Alert and Reponse Network (GOARN) -una red formada por agencias internacionales, gobiernos, universidades, y otras entidades- y solicitó especialistas en diversas áreas que puedan viajar a los tres países implicados para intentar contener el brote.
La semana pasada tuvo lugar en Accra, la capital de Ghana, una reunión de alto nivel sobre la epidemia en la que participaron 11 ministros de Salud de la región.
En ese encuentro los ministros se comprometieron a dar prioridad absoluta a la lucha y prevención contra la enfermedad, y a ofrecer toda la colaboración posible entre gobiernos.