El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió hoy a israelíes y palestinos que cesen la violencia en Gaza, donde a su juicio han muerto ya “demasiados civiles”, y advirtió que una invasión terrestre por parte de Israel solo empeoraría las cosas.

 

Ban, en un comunicado de su portavoz en el que también condenó el lanzamiento de cohetes por parte de Hamás, urgió a las dos partes a tomar medidas “inmediatas” para poner fin a los combates y evitar así más víctimas, tal y como ayer reclamó el Consejo de Seguridad.

 

“Demasiados civiles palestinos han muerto y cualquier ofensiva terrestre israelí aumentará sin duda el número de víctimas y exacerbará el sufrimiento de los civiles en la franja de Gaza”, advirtió.

 

El diplomático coreano se mostró “profundamente preocupado por el impacto en las familias palestinas de la acción militar israelí” y recordó que los habitantes de Gaza han visto negada “por mucho tiempo la sensación de libertad y dignidad que merecen”.

 

Al mismo tiempo, recordó a Hamás que el “lanzamiento indiscriminado de cohetes contra objetivos civiles israelíes es una violación de la legislación internacional”. Ban, que se declaró horrorizado por las imágenes de familias israelíes teniendo que protegerse en refugios, condenó estos “ataques indecentes” y demandó su cese inmediato.

 

Así, el secretario general de la ONU apeló a las dos partes del conflicto para que cumplan con la petición de alto el fuego expresada ayer por el Consejo de Seguridad y defendió que la reducción de la tensión sería beneficiosa para todos los bandos.

 

Ban urgió a palestinos y a israelíes a tomar “medidas inmediatas” para poner fin a los combates, evitar que haya más víctimas y dejar de ampliar los peligros para la paz y la seguridad en la región. Además, insistió en que el conflicto palestino-israelí no puede ser resuelto por la vía militar por ninguna de las dos partes.

 

Ayer, el Consejo de Seguridad, máximo órgano de decisión de la ONU, demandó también a las dos partes un alto el fuego y el reinicio de las conversaciones de paz. Sin embargo, la violencia aumentó hoy, cuando 45 palestinos perdieron la vida en la jornada más mortífera de la ofensiva israelí contra Gaza y continuó el lanzamiento de misiles sobre territorio israelí.