BUENOS AIRES. El secretario de Seguridad de Argentina, Sergio Berni, denunció hoy que la violencia que estalló en el centro de Buenos Aires fue intencional para opacar los festejos por el subcampeonato en el Mundial de Brasil.

 

“Esto no fue producto de la casualidad, fue totalmente planificado, hubo una planificación para que ocurriera esto y para que se pudiera generar un gran caos”, dijo Berni al evaluar las consecuencias del festejo que terminó en robos y peleas.

 

La víspera, decenas de miles de personas se concentraron en los alrededores del Obelisco de Buenos Aires para celebrar que Argentina hubiera llegado nuevamente a una final luego de 24 años y el papel humillante que protagonizó Brasil, su rival histórico.

 

El festejo, sin embargo, se vio opacado por la noche, cuando grupos de vándalos intentaron saquear comercios en la zona, provocando destrozos y peleas con las fuerzas de seguridad, y dejando un saldo de 120 personas detenidas.

 

Berni explicó que “los delincuentes intentaron llevar zozobra para poder así hacer saqueos, robar a la gente y pelearse entre ellos”, lo que fue lamentable porque “no tienen derecho a aguar la fiesta de una sociedad”.

 

Añadió que estas personas no fueron a celebrar nada, sino que tenían “una clara intención de generar el caos, para delinquir y saquear, querían que hubiera corridas”.