En medio del debate interno por la renovación de la dirigencia del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano asegura que no se vende caro para aceptar una candidatura de unidad que lo lleve a suceder a Jesús Zambrano.
En entrevista, el tres veces candidato presidencial mantiene su postura de negarse a contender por la presidencia nacional del partido, que en dos meses será renovada.
Desde sus oficinas en el Centro Histórico, donde despacha como coordinador de Asuntos Internacionales del Gobierno del Distrito Federal, el líder moral del sol azteca rechaza, tajante, pedir posiciones a cambio de tomar las riendas del PRD; por el contrario, asegura que su decisión dependerá de las condiciones en las que marche el proceso interno.
De aceptar y llegar a ser el líder de su partido, una cosa sí tiene clara: reprobaría cualquier conformación de alianza con el Partido Acción Nacional (PAN) para los comicios de 2015, debido a que en todo momento ha reprobado las coaliciones entre izquierda y derecha, por su contradicción natural.
A sus 80 años de edad, el principal fundador del PRD tiene una tarea difícil: echar abajo la reforma energética, a través de una consulta popular, a realizarse en junio de 2015, emparejadas con las elecciones intermedias. Para ello, plantea recolectar cuando menos 4 millones de firmas ciudadanas, por lo que confía en que las autoridades las validen para efectuar el llamado referéndum petrolero.
El ingeniero se ve en 2018, año de elecciones presidenciales, desde su trinchera por rescatar la soberanía del país, impulsando cambios para mejorar las condiciones de vida de la gente. Y si el plan de la consulta popular falla en 2015, asegura que continuará con su labor de rescatar el petróleo de las manos privadas extranjeras.
¿En toda su experiencia política, usted cree que sí hay una posibilidad real de que haya una consulta popular para echar abajo la reforma energética?
Bueno, de acuerdo con la ley, nosotros creemos que existe la posibilidad. Esperemos, desde luego, la respuesta en su momento de las autoridades. Nosotros estamos siguiendo todos los trámites y requisitos que la ley establece y espero que, oportunamente, se convoque a la consulta que tendría que ser coincidente con la elección de junio del año próximo.
Hay un trámite con el Instituto Nacional Electoral (INE) que tiene que revisar cuáles son válidas las firmas y compaginar nombres y números de credencial de elector y la SCJN es la que finalmente falla sobre la constitucionalidad o no la demanda que se está haciendo.
¿Cree que el PRI, con todas las herramientas a su alcance, le permita a su movimiento de resistencia realizar la consulta?
Vamos a ver, yo no adelanto vísperas, vamos a ver.
¿Qué le parece el papel del PAN en todo esto?
Simplemente ha estado en términos generales, salvo honrosas excepciones, opuesto a que se rescate este control por parte del Estado mexicano de los recursos energéticos.
Andrés Manuel López Obrador también está luchando por una consulta popular, ¿qué opina de esta labor de Morena?
Entiendo que están también buscando reunir firmas para solicitar que haya una consulta coincidente con la elección federal.
¿Habrá alguna conjunción entre PRD y Morena?
Hay convergencia en este caso, estamos solicitando lo mismo. No sabemos qué vayan a fallar las autoridades en este caso.
¿En su agenda hay alguna posibilidad de reunión con López Obrador?
No lo tenemos previsto, no sé si él lo tenga previsto pero no hay previsiones para una reunión con él.
¿Digamos una reunión para que haya una conjunción de estas tareas para la consulta popular?
Estamos coincidiendo, hasta donde yo entiendo Morena está recolectando firmas, en el PRD estamos recolectando firmas y serán las autoridades las que decidan si procede o no procede la consulta ciudadana.
¿Qué le parece que AMLO se postule por tercera vez para la presidencia de la República en 2018, le ve posibilidades?
Es una decisión de Andrés Manuel. No sé si tenga posibilidades… se lo digo en 2018.
¿Usted dónde se ve en 2018?
Donde estoy, impulsando los cambios que el país requiere, el rescate de la soberanía, rescate del petróleo si no lo hemos rescatado en esta consulta de 2015, buscando las mejores condiciones de vida de la gente.
¿El actual líder del PRD, Jesús Zambrano, ha dicho que no ve mal una alianza entre el PRD y Morena en las presidenciales?
No tengo nada que opinar en ese respecto, vamos a ver cuáles son las condiciones en 2018. Hay dos posibilidades: sí o no apoyar.
¿Cómo ve las alianzas PRD y PAN para 2015?
Contradictorias, en términos generales son contradictorias estas alianzas, a menos que el PAN apoyara totalmente los programas y propuestas del PRD.
¿De las elecciones pasadas, donde el PRD ha ganado posiciones en alianza con el PAN y viceversa, qué tipo de gobiernos se esperan de esas alianzas?
No esperaría nada bueno de esas alianzas, ni veo nada bueno de esas alianzas porque no veo los principios del PRD en ninguna de ellas.
¿Usted ve que haya cuadros a la altura de la elección de 2018 de parte del PRD?
Sin duda que hay cuadros, pero eso lo diré en 2018, pero sí hay.
Hablando un poco de su partido y de su proceso interno, ¿qué le parece que el INE le esté ayudando en la organización, es falta de confianza al interior?
Es una decisión que toma la dirección de mi partido, me parece que está bien. Esto no se había hecho antes.
¿Usted sigue en la misma postura de participar, sigue esperando una candidatura de unidad?
Yo siempre he dicho que no voy a contender… a contender no.
¿Es decir si todas las corrientes del PRD, la dirigencia y todo en su conjunto, lo apoyan para que usted vaya, usted aceptaría liderar al PRD?
Depende de qué condiciones haya en mi partido.
Dicen que usted se vende muy caro para aceptar la dirigencia.
No me estoy vendiendo. Ni comprando ni vendiendo.
Dicen que está pidiendo mucho, pidiendo posiciones.
No estoy pidiendo ninguna posición, de nadie, es falso eso que se está diciendo, es una mentira.
Denme nombres y apellidos de los que estén diciendo o preséntenme los textos y con todo gusto les contesto.
Regresando a la consulta popular ¿Acaba el 15 de septiembre esta recolección de firmas y después qué pasará?
Acabamos el 15 de septiembre y si se autoriza la consulta, haríamos una campaña para llamar al voto para que se echen abajo esas contrarreformas constitucionales.
Cuando las autoridades nos digan que hay consulta, en ese momento iniciamos una campaña para llamar al voto.
¿La campaña será conjunta con los candidatos a elecciones de junio de 2015?
Claro, para junio de 2015, independientemente de las candidaturas que puedan presentar los distintos partidos en el Partido de la Revolución Democrática (PRD).
¿Cuál ha sido la respuesta en los estados, cuántas firmas tienen?
La respuesta ha sido buena. Hemos ido muy bien en la recolección de firmas, ha habido una buena respuesta, tenemos todavía varios eventos previstos de aquí a septiembre.
Ya hay más de un millón de firmas recolectadas en este momento. En lo que sería la segunda etapa, porque en la primera etapa tenemos ya un millón 700 mil firmas colectadas que han sido validadas por el Senado y se presentarán junto con las que se colecten en esta segunda jornada de recolección de firmas.
¿No podrían caer en la duplicidad con estas firmas que están entregando?
Posiblemente algunas, pero la idea es no caer y, en todo caso, lo va a revisar el Instituto Nacional Electoral (INE) cuando lleguen las firmas y ahí dirán cuántas quedan y cuántas no quedan.
Pues habiéndose cumplido la cantidad necesaria en la primera etapa, esta segunda etapa de recolección, más allá de los errores que pudiera tener y espero que sean pocos, va a fortalecer la solicitud de que se convoque a la consulta.
Creemos que es importante que haya este mayor respaldo social y político a la solicitud de firmas.
¿Al final serían más de cuatro millones de firmas?
No sabemos cuántos vayan a ser a final de cuentas, pero estamos sin duda por arriba de las que se requieren, de acuerdo con lo que la ley establece.
Falta todavía julio, agosto y lo que sería parte de septiembre. Hay varios estados que no han entregado y hay otros que, aunque hayan entregado una parte, pues siguen el trabajo de reunir firmas.