Conclusiones preliminares de las investigaciones del enfrentamiento ocurrido el 9 de julio en la autopista Atlixco-Puebla revelan que pobladores de San Bernardino Chalchihuapan utilizaron cohetones en contra de la policía que pretendía liberar la circulación.
Ese día, José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, de 13 años, recibió un impacto en la cabeza durante la gresca. Según la denuncia penal de su madre, Elia Tamayo Montes, un cohetón le destrozó el cráneo y le causó la muerte.
De acuerdo con la versión del gobierno del estado, durante la agresión los manifestantes detonaron al menos 200 cohetones, cuyo poder de impacto no sólo lesionó personas, sino que destrozó cascos protectores y escudos de la policía.
Sin embargo, los pobladores que participaron en el bloqueo carretero y el enfrentamiento sostienen que las fuerzas del orden utilizaron balas de goma en el operativo para desalojarlos y que una de ellas fue la que le provocó la muerte al menor.
En respuesta, el gobierno estatal solicitó, mediante el oficio SSP/06/09368/2014, un informe a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sobre la venta u otorgamiento de este tipo de municiones, debido a que el Ejército es la única autoridad responsable de vender balas de goma en el país.
La respuesta, en el oficio 28003 y signada por el general comandante de la Vigésima Quinta Zona Militar, fechada el día 18 de julio de 2014, confirma que durante la presente administración la policía estatal nunca ha adquirido balas de goma.
La versión de que fue un cohetón el que mató a José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo consta en declaraciones ministeriales de la madre, quien asegura que a su hijo lo impactó uno de estos proyectiles, que le hizo un boquete en la cabeza y lo mató.
De acuerdo con la denuncia que interpuso el mismo día de los hechos ante la Procuraduría General de Justicia del Estado y escrita con su puño y letra, su hijo la acompañó a llevar comida a unos campos que se encuentran cerca del puente de la autopista de San Bernardino Chalchihuapan, en el municipio de Santa Clara Acoyucan, cuando un cohetón lo impactó en la cabeza.
“Y veo cerca del puente que se encontraba una multitud de personas civiles (sic) que aventaban cuetes (sic) que tronaban muy fuerte y como mi hijo caminaba a cinco metros adelante de la suscrita, uno de esos cuetes lo lesionó en la cabeza, porque cuando tronó dicho cuete vi que mi hijo cayó al suelo y comenzó a sangrar de su cabeza, luego al poco tiempo llegó una ambulancia y dicha ambulancia se trajo a mi hijo al Hospital General del sur, por lo que formulo Denuncia por el Delito de lesiones en contra de quien resulte responsable…”.
Ayer, la Procuraduría estatal confirmó el uso de cohetones durante el enfrentamiento y que las lesiones que provocaron la muerte del menor no fueron causadas por balas de goma y sí por un proyectil con pólvora, según los primeros dictámenes periciales.
Los hechos
La falta de un Registro Civil en San Bernardino Chalchihuapan provocó que a partir del 2 de julio pasado, pobladores iniciaran una serie de protestas sobre la carretera federal y la autopista Puebla-Atlixco. Ese día se manifestaron alrededor de mil 500 personas.
El 9 de julio, a las 10:00 horas unos 80 pobladores comenzaron una nueva manifestación, con el bloqueo de la carretera. Para el mediodía, se endurece la protesta con el cierre de la carretera federal y una marcha procedente de San Miguel Canoa a Casa Aguayo. Se agota el primer diálogo sin éxito.
A las 13:10 horas, la policía municipal de Santa Isabel Cholula reporta que alrededor de 300 inconformes bloquean la autopista Atlixco-Puebla en ambos sentidos. Media hora después fracasa un segundo diálogo con los manifestantes.
Para las 13:54 horas, el mando policial entabla por tercera ocasión una negociación y llama a los inconformes a desbloquear la carretera. En respuesta, los manifestantes comienzan a agredir verbalmente a los uniformados.
Y aunque a las 14:00 horas, los pobladores comienzan a agredir a los policías estatales con rocas y palos, 25 minutos después las fuerzas del orden logran replegar a los agresores y liberan la circulación de la autopista.
A las 14:30 horas, los inconformes suben al puente desde donde reinician las agresiones contra los policías, al tiempo que vuelven a bloquear la carretera. Y justamente tres minutos después hacen su aparición los cohetones, que son lanzados desde el puente San Bernardino Chalchihuapan por los manifestantes.
Para las 14:55 horas, según registros gráficos de los hechos, policías resguardan el puente por ambos lados, lo que hace que los manifestantes se reagrupen y ataquen con cohetones y petardos.
A las 15:20 horas, elementos de la policía se ven acorralados sobre el puente y bajan hacia la autopista, al no tener otra alternativa para salvaguardar su integridad física. Media hora después, los pobladores persisten en su bloqueo y retienen a dos elementos de la policía estatal, mismos que son golpeados con bastones PR-24 que les fueron arrebatados.
A las 16:40, paramédicos logran sacar a uno de los policías retenidos, el cual se reporta gravemente herido.
Finalmente, a las 18:00 horas los inconformes liberan la vía en ambos lados. El saldo que dejó el enfrentamiento fue de un niño muerto, dos civiles y 48 policías heridos, así como cuatro personas detenidas.