MORELIA. Previó a su traslado a la capital michoacana, los menores que aún habitan la casa hogar de La Gran Familia, han sido objeto de más de 500 revisiones médicas y psicológicas, por parte de la Secretaría de Salud del Estado de Michoacán.
Así lo informó el titular de la dependencia, Carlos Aranza, quien manifestó que ésta no tiene registros ni antecedentes clínicos que certifiquen casos de violación o abuso sexual. Señaló que estas observaciones la mantiene a resguardo la Procuraduría General de la República (PGR).
Carlos Aranza manifestó que los principales cuadros clínicos que presentan los menores son relacionados a problemas gastrointestinales, de nutrición, de parásitos y, en algunos casos, mentales por uso inadecuado de medicamentos.
En conferencia de prensa, el funcionario estatal negó que el Centro Michoacano de Salud Mental (Cemisam) haya sido tomado por “asalto” para sacar de manera sorpresiva a los 80 empleados ahí laboraban, para habilitar el espacio como albergue para los 341 menores que se encuentran en la casa hogar La Gran Familia.
Aseguró que es falso que los pacientes y empleados hayan sido sacados bajo presión federal y argumentó que desde el día de ayer jueves se notificó que dicho centro tendría un nuevo domicilio.
(Con información de Quadratín)