El presidente de la Comisión de Energía en el Senado, David Penchyna Grub, adelantó que defenderá la decisión de los diputados de establecer un esquema tripartita para el pago de los pasivos de Pemex y CFE, al afirmar que “nos guste o no” la deuda de ambas empresas ya es deuda pública.
En conferencia, el legislador del PRI consideró que sería una “tontería” no atraer como deuda soberana la tercera parte de los pasivos de Pemex pues, aseguró, ello generaría dos problemas.
Advirtió que en primer lugar sería más caro financiar a Petróleos Mexicanos y, segundo, la nueva empresa productiva del Estado no podría competir en igualdad de circunstancias.
En ese sentido, Penchyna Grub apoyó el modelo de pago propuesto por los diputados, que condiciona el financiamiento del gobierno federal a cambio de que el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) admita reconvenir algunas cláusulas de su contrato colectivo.
Cuestionado sobre el rechazo de los trabajadores petroleros y líderes sindicales a esta propuesta, el senador afirmó que no se les obligará a los trabajadores a convenir con esta negociación; sin embargo, advirtió que de no ser así Pemex perderá la oportunidad de obtener las aportaciones del gobierno federal.
“Nuestra obligación es poner los incentivos en la ley; lo demás ya es decisión de las partes y no se les puede obligar tampoco”, declaró, tras considerar que lo mejor sería cambiar la situación financiera de Pemex y con ello quitarle “un grillete de la pata derecha”, que la haría más competitiva y con mejor expectativa hacia el futuro.
Aunque refirió su apoyo en favor de este esquema de saneamiento, el senador del PRI señaló que de no lograrse este supuesto, tampoco significará el fracaso de la empresa ya que tendrá muchas maneras de fondearse.