TEGUCIGALPA. México deportó hoy a 111 hondureños, 71 de ellos menores de edad, en el marco de la crisis migratoria que enfrentan varias naciones centroamericanas después de que miles de niños y jóvenes hayan emprendido solos el viaje hacia Estados Unidos, informaron organismos de derechos humanos.

 

Los repatriados llegaron a la norteña ciudad de San Pedro Sula en seis autobuses desde el municipio de Tapachula (Chiapas), en el sur de México, dijo a los periodistas Jaclyn Escobar, portavoz del Hogar de Niños Emanuel que acoge a los infantes retornados en esa zona del país.

 

Los retornados fueron recibidos por autoridades de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (DINAF), la organización humanitaria Casa Alianza y el no gubernamental Centro de Atención al Migrante Retornado.

 

Escobar indicó que los deportados llegaron “en condiciones buenas de salud, aunque un poco decepcionados por no haber llegado a Estados Unidos y un poco cansados por el viaje”.

 

En lo que va de 2014, México ha deportado unos 23 mil  hondureños migrantes, incluidos más de seis mil  menores, según cifras oficiales.

 

Al menos tres mil  hondureños, incluidos menores de edad, abandonan el país cada mes con la idea de llegar a Estados Unidos por la falta de trabajo o para reencontrarse con sus familiares en ese país, de acuerdo con organismos de derechos humanos.

 

Según datos del gobierno estadunidense, unos 90 niños no acompañados cruzan diariamente la frontera suroeste del país y ya suman más de 57 mil  los niños detenidos en los últimos meses tras entrar a Estados Unidos de manera ilegal.