JERUSALÉN. El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) aseguró hoy que continuará su lucha hasta que sus demandas sean satisfechas, después de que Israel prometió mantener su ofensiva militar contra el grupo armado en la Franja de Gaza.
La respuesta de Hamás al reciente mensaje del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, sepultó esta noche las esperanzas de que terminase el enfrentamiento armado entre ambas partes, que se ha cobrado ya la vida de más de mil 660 palestinos y 63 israelíes.
El jefe del Gobierno israelí anunció en un mensaje a la nación que el ejército de su país mantendría la operación “Marco Protector” hasta cumplir su objetivo final que es garantizar la seguridad y tranquilidad de sus ciudadanos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) emprendieron una ofensiva contra el grupo islámico y su infraestructura, teniendo como blanco específico la destrucción de la red de túneles que los milicianos de Hamás utilizan para atacar al territorio israelí.
Tanto Netanyahu como la FDI confirmaron este sábado que esa misión estaba a horas de concluir, pero el líder del Estado israelí aseguró que las operaciones militares continuarían después de que las fuerzas de seguridad se reagruparan.
En una primera reacción, el grupo armado declaró a la prensa que también seguirá en su lucha hasta que el gobierno israelí cumpla las demandas palestinas, según reportes de la prensa local.
“Vamos a continuar nuestra resistencia hasta que logremos que sean respetados nuestros derechos e Israel se retire de los territorios ocupados”, sostuvo un vocero de Hamás.
Otro portavoz del grupo dijo que Israel debe elegir entre “permanecer en la Franja de Gaza y pagar el precio, o retirarse y pagar el precio, o celebrar negociaciones y pagar el precio”, de acuerdo con despachos de la agencia palestina de noticias Ma’an.
Los voceros de Hamás aseguraron que el Estado israelí será derrotado moralmente en las próximas horas.
En este contexto parece desaparecer la posibilidad de una solución diplomática al conflicto, pues a ello se suman los anuncios previos del gobierno de Israel y de Hamás referente a que no asistirán a las conversaciones establecidas en El Cairo, Egipto.
Mientras tanto, los bombardeos continuaron en todo el territorio palestino, en particular en la sureña ciudad de Rafah donde la artillería israelí causó la muerte de más de 70 personas e hirió a un centenar más.
Sin embargo, la cifra podría superar los 120 decesos, advirtieron fuentes médicas palestinas, quienes indicaron que el número mortal sólo podrá ser actualizado una vez que se abran los accesos a Rafah, pues las tropas isaraelíes mantienen acordonada la ciudad.
Otros objetivos, de los más de 200 alcanzados esta jornada por las fuerzas iraeslíes, fueron la importante mezquita Shifa y la Universidad islámica en la ciudad de Gaza.
El Ministerio de Salud de Gaza informó la noche de este sábado que el saldo de víctimas se elevó a mil 677 palestinos muertos y a ocho mil 900 heridos desde que comenzó la ofensiva militar contra Hamás hace 26 días, mientras que las FDI reportaron 63 bajas entre sus filas.