JERUSALÉN. El Ejército israelí ha establecido un equipo con la misión de recopilar información y pruebas sobre la contienda que mantiene contra el grupo islamista Hamás en Gaza, a fin de contrarrestar eventuales acusaciones de crímenes de guerra.

 

De acuerdo al diario “Haaretz”, el equipo está encabezado por el jefe de la Oficina de Planificación del Ejército israelí, Nimrod Sheffer, e incluye a miembros de la Fiscalía Militar, de la Comandancia Sur, de la División de Gaza y la Fuerza Aérea.

 

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU acordó el pasado 23 de julio crear una comisión internacional para investigar las posibles violaciones cometidas durante la ofensiva israelí en Gaza, que comenzó quince días antes, tras aludir a que Israel podría haber cometido crímenes de guerra.

 

El Ejército y el Ejecutivo israelí por su parte acusan a Hamás de cometer crímenes de guerra al atacar de forma indiscriminada a la población civil.

 

La labor del equipo israelí se centra en recabar pruebas que atestigüen el uso de la población civil como escudos humanos por parte de las facciones armadas palestinas, en particular vídeos y documentación en poder de la Fuerza Aérea.

 

El Ejército israelí argumenta que hay varios sucesos en los que murieron o resultaron heridos civiles en Gaza de los que no ha quedado claro qué parte es la responsable de los mismos.

 

Asimismo ha rechazado las acusaciones de que las víctimas hayan sido por fuego israelí en varios casos, como una explosión en el campo de refugiados de Shati o en el hospital Shifa de Gaza.

 

Israel estudia analizar asimismo la planificación de objetivos en el seno de la Fuerza Aérea, que incluyen cálculos de posible daños a edificios vecinos en los blancos de los ataques aéreos.

 

El periódico afín al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, “Israel Hayom” informó del establecimiento del equipo el viernes y reveló que lo integrarán además funcionarios de los ministerios de Exteriores y Defensa.

 

El nuevo equipo también presentará pruebas sobre la actuación de Hamás durante los combates en Gaza en el transcurso de la ofensiva.

 

Estos trabajos preliminares se llevan a cabo en previsión de una posible investigación internacional como la que analizó la ofensiva de Israel en Gaza a principios de 2009, o el asalto israelí a una flotilla un año después cuando pretendía llegar a la costa de Gaza, y en el que murieron nueve activistas turcos.

 

La jurista israelí Talia Sasson, encargada de formular un documento a solicitud del Gobierno que censuraba la proliferación de enclaves judíos en Cisjordania la década pasada, subrayó que una vez acabada la campaña, Israel debería crear una comisión legal independiente.

 

Invitada a un debate de expertos por el Canal 1 de la televisión israelí, Sasson recalcó que dicha comisión debería investigar desde el punto de vista legal la actuación de las tropas israelíes ante posibles acusaciones en foros internacionales.

 

Y señaló que la comisión no debería incluir al Ejército israelí, parte implicada en el conflicto, sino a organizaciones legales y de derechos humanos que trabajan de forma independiente para esclarecer las alegaciones sobre violaciones de los derechos humanos.