NACIONES UNIDAS. La ONU condenó hoy el ataque contra una escuela de su agencia para los refugiados palestinos (UNRWA) en la ciudad gazatí de Rafah, en el que murieron al menos 10 civiles, y exigió una rápida investigación y que los responsables respondan ante la Justicia.
“Es un ultraje moral y un acto criminal”, denunció el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, en un comunicado de su portavoz, en el que se refirió al suceso como “otra grave violación de la ley humanitaria internacional”.
El diplomático coreano subrayó que los refugios de la ONU deben ser zonas seguras y recordó que se “ha informado repetidamente a las Fuerzas Armadas de Israel del lugar de esas instalaciones”.