La secretaria del Trabajo y Fomento al Empleo del Distrito Federal, Patricia Mercado, está convencida de que lograr un aumento significativo al salario mínimo no es complicado, pero advierte que el primer paso para ello es desvincularlo de los conceptos con los que está relacionado, como es su utilización como “unidad de cuenta”.

 

En entrevista para 24 HORAS, la integrante del gabinete económico del Gobierno del Distrito Federal aclara que la discusión sobre el aumento no es “una mesa de negociación” entre gobierno, partidos, empresarios y sindicatos, sino un “diálogo social” entre todas las partes con el objetivo de lograr un gran acuerdo.

 

Para la también ex candidata presidencial en la contienda de 2006, la concreción de un aumento al salario mínimo no sería un logro del gobierno capitalino, sino de todos los involucrados.

 

Aclara que la propuesta hecha el 1 de mayo por el jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, no es una ocurrencia, sino el llamado a dar un debate que ya ocurrió en el terreno internacional.  Además, asegura que la propuesta del Partido Acción Nacional (PAN) de llevar el tema a una consulta popular el próximo año está relacionada con el proceso electoral de 2015.

 

Hay renuencia en los empresarios para elevar el salario mínimo…

 

Los empresarios están defendiendo sus intereses y es absolutamente legítimo, igual que los sindicatos están defendiendo los suyos. Este debate sobre el salario mínimo no es una mesa de negociación entre sindicatos y empresas, es un diálogo social. La idea no es imponer nada porque no nos conviene ni a los empresarios ni a nadie.

 

Coparmex Ciudad de México habla de primero desvincular el salario y luego discutir el aumento…

 

Tiene absolutamente razón José Luis Beato, de la Coparmex Ciudad de México. Efectivamente, si no se desvincula no podemos avanzar, porque crearíamos una situación muy complicada en el sentido de que está vinculado a muchos conceptos que no tienen que ver con el derecho al salario. La desvinculación es el primer paso. No es complicado.

 

¿Por qué no se ha hecho?

 

 

Había sido relativamente sencillo decir: el salario mínimo tiene que estar muy abajo, solamente lo que sube la inflación, porque si no crea un proceso inflacionario tremendo. Esto, después de lo que Miguel Ángel Mancera puso en la mesa, ya no es una explicación. Lo que estamos planteando es: tenemos acuerdo de desvinculación, adelante, y frente a eso, pongámonos de acuerdo en una ruta. Hasta ahora cada uno está declarando por su lado.

 

¿Qué se debe hacer al respecto?

 

Ojalá se convoque pronto a la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) que es donde el jefe de Gobierno va a poner una propuesta específica en la mesa. Yo creo que el jefe de Gobierno ha sido muy responsable en decir “vamos a debatir el tema, vamos a desvincular y yo voy a poner un documento elaborado por expertos, no por mi gobierno, que nos digan cuál puede ser la ruta en el corto, mediano y largo plazo y ver si estamos en posibilidades, este diciembre, de poner un aumento al salario mínimo”.

 

¿Cuál sería la ruta para discutir el aumento?

 

Debemos esperar a que termine el Congreso de la Unión las reformas que en este momento se están discutiendo. Terminando este debate, pues poner en la mesa esta discusión del salario mínimo. Creemos en el gabinete económico del Distrito Federal que ésta es la reforma que falta. A fines de septiembre tendrá que estar discutiendo el Congreso de la Unión estas propuestas sobre la desvinculación.

 

Pero el Congreso empezará a discutir la reforma al campo, ¿se podrá lograr algo de aquí a diciembre?

 

Lo importante es avanzar algo. Creo que el gran acuerdo es la desvinculación. Esto se puede hacer, no es una reforma complicada. Simplemente lo que se hace es cambiar todas las mediciones que digan salario mínimo a UDIS (unidades de inversión) o cualquier otra unidad de medida. Creo que hay un acuerdo importante.

 

Que eso nos lleve a que en diciembre la Comisión Nacional de Salarios Mínimos dictamine un aumento de más de dos pesos, que sería el 3%; posiblemente no, no lo sé. Yo creo que hay que hacer el esfuerzo para que haya un aumento significativo para el 2015 o por lo menos decir “ya se desvinculó, aumentamos en enero tal porcentaje y siguen aumentos paulatino”.

 

Muchos dicen que la propuesta de Mancera es para ganar terreno político, ¿qué les dice?

 

Para el doctor Mancera es un tema de convicción. No lo planteó ahorita que ya vienen las elecciones. Lo planteó el primero de mayo, el Día del Trabajo, frente a los actores productivos. El jefe de Gobierno no viene a decir “yo soy el bueno de la película”, sino que dijo “diálogo social, vamos a discutirlo en la Conago, vamos a hacer esta propuesta y lleguemos todos juntos a un acuerdo”. El gobierno tiene una posición, pero no impone. No tiene nada qué ver con las elecciones.

 

¿Cómo califica la propuesta del PAN sobre una consulta?

 

Una consulta para 2015 es llevar muy lejos la posibilidad de ir avanzando. Esto sí me parece un poco más relacionado con el proceso electoral. Nos hubiera gustado que el PAN se hubiera pronunciado sobre la desvinculación y no hacer una consulta cuando la respuesta es obvia, cuando retrasa una discusión frente a una demanda ciudadana que está aquí y ahora. Por una parte, que bien que sumen y, por otra, el momento me pareció incorrecto.

 

¿El GDF va a llegar al Foro Internacional con la propuesta se subir a 87 o 100 pesos el salario mínimo?

 

No. No se va a poner en la mesa una cantidad, porque esto es parte de la construcción de un posible acuerdo. Lo que se va a poner en la mesa es la importancia de ver realizado este debate y la liga entre salario mínimo, ingresos, desigualdad y crecimiento económico. La receta ha sido al revés: crecimiento económico y luego resolvemos salario y desigualdad.

 

¿El gobierno de Mancera logrará lo que no se ha hecho en 30 años?

 

Yo creo que lo vamos a lograr todos juntos. Yo creo que el doctor Mancera lo que ha dicho es “no me cuelguen a mí la medalla, yo propuse un debate y vamos a colgárnosla todos”. Definitivamente ya no hay vuelta atrás. No es una ocurrencia. Es un debate internacional. Y en América Latina hay muchas experiencias, Uruguay en los últimos 10 años ha aumentado casi 400% el salario mínimo a partir de que hizo la desvinculación.