LAGOS. Una enfermera nigeriana que trató al estadunidense que falleció a finales de julio por el virus del ébola murió como consecuencia de la enfermedad, informó hoy el Ministerio de Sanidad de Nigeria.
La enfermera atendió al estadunidense Patrick Sawyer, que viajó a Nigeria desde Liberia y se convirtió en la primera víctima mortal del virus en territorio nigeriano, según precisaron las autoridades el pasado 25 de julio.
Otras cinco personas que mantuvieron contacto con Sawyer, quien falleció en un hospital de Lagos, dieron positivo en los análisis pruebas de detección del ébola.
El ministro nigeriano de Sanidad, Onyebuchi Chukwu, exigió a los gobernadores de los estados del país que abran más centros de aislamiento para tratar a enfermos sospechosos de haber contraído el virus, con el objetivo de evitar la propagación de la enfermedad.
Además, Chukwu, citado por medios locales, desveló que Nigeria solicitó a Estados Unidos la adquisición del medicamento experimental Zmapp, suministrado a dos médicos estadunidenses que se infectaron en Liberia y han sido repatriados.
“Estamos en contacto con los estadunidenses. Ayer (martes), hablé por teléfono con el director del Centro de Control de Enfermedades y Prevención, el doctor Tom Freiden. Hablamos largo y tendido e intercambiamos correos electrónicos”, dijo el ministro.
El ZMapp, un suero que nunca antes había sido aplicado a humanos, había mostrado resultados prometedores en pruebas realizadas en monos.
Nigeria, país más poblado de África, ha empezado a tomar medidas para contener el virus, que ya ha causado 887 muertos en África Occidental en los últimos cuatro meses, según los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) divulgados este lunes.
El ébola -que se transite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados- causa hemorragias graves y puede tener una tasa de mortalidad del 90 por ciento.
Ésta es la primera vez que se identifica y se confirma una epidemia de ébola en África Occidental, pues hasta ahora siempre se habían producido en África Central.