¡Pues no! El presidente Enrique Peña Nieto no anunciará hoy en Guadalajara, Jalisco, la gran reforma al campo mexicano, ni el gran acuerdo para el mismo sector que elaboró un grupito de “emisarios del pasado” que contrató el titular de Agricultura, dicen los enterados. Lo que anunciará hoy el presidente de la República es “La Nueva Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero”. Nada más y nada menos.
Concluida la reestructura administrativa, organizacional y una “limpieza profunda” que durante cuatro meses llevó a cabo Juan Carlos Cortés, director de esa nueva institución de la Banca de Desarrollo, hoy se darán a conocer nuevos productos y esquemas de financiamiento; programas especiales a pequeños productores con mejores condiciones de crédito; plazos de hasta 20 años, tasas de interés de un dígito, reducción de requisitos y eliminación de garantías, entre lo más importante.
Si después el secretario de Agricultura Enrique Martínez y Martínez quiere hacer su reformita, pues allá él, porque diga lo que diga, todo parece indicar que la gran reforma al campo quedará reducida a un programa de acuerdos financieros a cargo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, mediante acciones que encabezará preponderantemente la Nueva Financiera Nacional de Desarrollo.
De manera pues, que al quedar convertida cuasi a cenizas la multicitada reformita, dos funcionarios federales cosecharán los frutos de la decisión presidencial, el secretario de Hacienda, Luis Videgaray y el director de la Financiera, Juan Carlos Cortés García.
Con la nueva institución, Videgaray, por ejemplo, podrá demostrar en el corto y mediano plazo que los beneficios de la reforma financiera aprobada por el Legislativo a finales de 2013 y promulgada por el Ejecutivo el 9 de enero de este año, serán tangibles para miles de pequeños productores. Hasta la fecha, y digan lo que digan, de la reforma financiera “ni sus luces”. Más aún, si Videgaray “se pone las pilas” podrá hacer de los nuevos productos, programas y esquemas financieros diseñados por la Nueva Financiera Rural un importante instrumento que, bien utilizado, le permitirá fortalecer su relación política con todos los gobernadores y con las organizaciones campesinas oficiales y oficiosas de todos los colores y sabores.
En síntesis, la verdadera reforma del campo será financiera.
¿Y entonces por qué los diputados del PRI, PAN, PRD andan urgiendo al presidente Enrique Peña Nieto para que mande su iniciativa de reforma al campo para que los campesinos se vuelvan productivos y competitivos, se alcance la seguridad alimentaria, se fomente a la agroindustria y al sector exportador? Ah, y que acabe con la miseria en la que vive más de 60% de la población rural. ¡Pues porque aquéllos insisten en seguirle dando a los fregados “atole con el dedo”!
AGENDA PREVIA
La semana pasada el subsecretario de Comercio Exterior de la secretaría de Economía, Francisco Leopoldo de Rosenzweig Mendialdua, se reunió en Washington D.C. con funcionarios estadunidenses para presentarles una propuesta -de la cual ya dimos algunos detalles- para resolver la controversia del “dumping” en las exportaciones de azúcar mexicana a Estados Unidos y subsidios, que interpusieron los industriales de ese país.
Dicen los enterados que a pesar de que este espinoso asunto compete también al Secretario de Agricultura, Enrique Martínez y Martínez, éste no designó a ningún funcionario de la dependencia para que acompañara a Rosenweig a defender la causa. A quien le corresponde el tema del “polvito blanco” en la Sagarpa es al subsecretario Jesús Aguilar Padilla, pero su jefe no quiso mandarlo, a lo mejor porque no le entiende “ni papa”. Hubieran enviado a Carlos Rello, director del FEESA, quien conoce a la perfección el asunto, comentan algunos industriales. ¡Pues tampoco quiso el patrón Enrique! ¿Por qué? Se preguntan los interesados en el asunto. ¡Pues nada más porque no se le dio su gana! Tampoco, tampoco, lo que ocurre es que Sagarpa no quiere meterse en broncas, y le pasó la bolita a Economía. Pues qué poca… solidaridad, ¿no?
Dice el coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, Manlio Fabio Beltrones, que la creación de los organismos sectorizados y órganos reguladores derivados de las leyes secundarias de la reforma energética, así como los programas y fondos especiales que establece el nuevo modelo de administración de la renta petrolera, requerirán de un replanteamiento del esquema tradicional con que se habían venido manejando los ingresos y egresos de la Federación. “No hay que gastar más sino mejor, con criterios de ahorro y transparencia”, subrayó.
Nada más por no dejar: El “duende de la errata” -más bien el demonio- se coló en la columna de ayer y eliminó la letra V mayúscula (o sea el número 5 romano) al citar el siglo XVIII, que es el que corresponde a la época de Potemkin, y lo dejó en siglo XIII.