ABUYA. El diagnóstico de dos casos nuevos de ébola causó alarma en Nigeria al ampliarse el círculo de quienes se han contagiado más allá de quienes atendieron a un pasajero que llegó enfermo a una de las ciudades más grandes de África.
Los dos nuevos casos corresponden a personas que fueron contagiadas por sus esposos, ambos trabajadores sanitarios que atendieron a Patrick Sawyer, el ciudadano nacido en Liberia pero criado en Estados Unidos que voló hacia Nigeria el mes pasado, ya contagiado del virus, después de visitar Liberia y Togo, y contagió a 11 personas antes de morir en julio.
Los trabajadores, un hombre y una mujer, murieron a causa del ébola, informó el viernes el ministro de Salud de Nigeria, Onyebuchi Chukwu.
Las autoridades nigerianas sostuvieron inicialmente que el riesgo de exposición a otros fue mínimo porque Sawyer fue colocado en aislamiento tras su arribo al aeropuerto, pero la comisionada de salud del estado de Lagos, Jide Idris, reconoció a principios de mes que Sawyer no fue puesto en cuarentena de inmediato al primer día de su llegada.
Los dos pacientes nuevos fueron puestos en cuarentena hace dos días cuando se les hicieron pruebas, dijo Chukwu. Ya habían estado bajo vigilancia, lo que significa que a diario se les revisaba para detectar si ya se les habían presentado los síntomas de la enfermedad, pero sus movimientos no estaban restringidos. Una vez que aparecieron los síntomas se les enclaustró.
Ahora las autoridades tratan de identificar y monitorear a todas las personas con las que tuvieron contacto.
En total, 213 personas están bajo vigilancia en Nigeria mientras las autoridades tratan de supervisar el estado de todos los que pudieron haber estado expuestos al virus, dijo Chukwu. Entre estos hay seis personas en el estado de Enugu, en el sureste del país.
Los dos últimos casos elevan a 14 el número de personas con la infección en Nigeria, incluyendo a Sawyer. Cinco han muerto a causa de la enfermedad, cinco se recuperaron y fueron dados de alta mientras que cuatro más están aislados bajo atención en Lagos, la ciudad más importante del país, donde aterrizó el avión que llevaba a Sawyer.
El daño ha sido mucho más grande en Guinea, Sierra Leona y Liberia, en donde se han registrado cientos de casos. Liberia es el país donde ha habido más muertes, con 576.
La Organización Mundial de la Salud está preocupada ante la posibilidad de que el alcance del brote haya sido subestimado y que “una gran cantidad de pacientes” podrían no haber sido detectados por las medidas de supervisión del gobierno, especialmente en Liberia y Sierra Leona.
MG