Luego de más de siete meses de emprendida la estrategia federal en Michoacán, donde uno de los “objetivos prioritarios” es la detención de Servando Gómez Martínez, La Tuta, líder de Los Caballeros Templarios, el titular de la Policía estatal indicó que para su captura participan todas las corporaciones de seguridad nacional en la entidad y el país.
Han sido reiteradas las ocasiones a lo largo de este año y medio en que las fuerzas federales, con apoyo de policías rurales e incluso las llamadas guardias comunitarias, estuvieron cerca de capturar al capo, pero no ha sido posible.
“Pues sí es una suma de esfuerzos que estamos haciendo, pero como se ha dicho es algo que va a pasar, pero la estrategia no radica en su detención, sino en una seria de trabajos a nivel seguridad, social y de prevención”, señaló una fuente del gobierno federal.
De acuerdo con la agencia Quadratín, Carlos Hugo Castellanos Becerra, titular de la SSP estatal, la encomienda de detener a Servando Gómez la lleva un “grupo especial”, en el que participan corporaciones como el Centro de Seguridad Nacional (Cisen), la Procuraduría General de la República (PGR), Procuraduría Estatal, la Policía y la Procuraduría estatales, entre otras.
Pero ante el desplazamiento de integrantes del cártel a otras partes del país en consecuencia de la embestida de la Federación en Michoacán, dicho grupo especial ha realizado operaciones fuera del estado sin que hasta el momento se haya concretado su detención.
Un ejemplo de ese “desplazamiento” es el caso de Juan Carlos Almazán Mendoza, alias El Pillo, presunto jefe de plaza de Los Templarios en Nueva Italia, Michoacán, quien fue detenido el pasado 19 de julio en Tijuana, a donde se había establecido bajo la facha de empresario por ocho meses antes de su captura.