La hemofilia, enfermedad hereditaria que se presenta principalmente en varones y en la que existen hemorragias sin motivo aparente, afecta a 400 mil personas a nivel mundial y a más de cuatro mil mexicanos.
Para el hematólogo del Hospital Infantil de Morelia, Miguel Herrejón Carmona, en décadas anteriores un paciente de hemofilia no tenía grandes expectativas de vida, ya que es un padecimiento en el que se presentan hemorragias en las articulaciones e incluso en el sistema nervioso, lo que puede causar daños irreparables.
Esta enfermedad, precisó el especialista, se debe a la falta de proteínas en la sangre, conocidas como Factores VIII y IX, las cuales actúan en conjunto para coagularla; por lo que una persona con esta enfermedad tarda un mayor tiempo en generar una barrera que evite la pérdida de sangre.
Pese a que registra baja incidencia, es de alto impacto social, no sólo porque puede ocasionar discapacidad, sino porque su tratamiento representa un costo promedio de entre tres mil y cinco mil pesos semanales, durante toda la vida del paciente, puntualizó Herrejón en conferencia de prensa.
Indicó que las entidades con mayor número de pacientes con hemofilia son Jalisco y el Distrito Federal, seguidos de Michoacán y Tabasco, sin embargo existen dos mil 400 casos sin diagnosticar, lo que convierte a México en uno de los países con mayor incidencia en América Latina.
Durante la presentación de un nuevo tratamiento para esta enfermedad, Gabriel Ramos comentó que a él le detectaron hemofilia desde su primer mes de vida; entre algunos de sus síntomas le aparecían moretones en la piel y constantemente lo tenían que llevar al hospital.
Recordó que al principio le daba miedo decirle a otras personas que padecía hemofilia, por temor a su reacción, no obstante, “ahora me siento orgulloso porque aunque tengo hemofilia, puedo jugar futbol y me di cuenta que era algo por lo que no debía sentir pena”.
Por su parte, el gerente de Biociencias en Baxter México, Julio Álvarez Obregón, explicó que para un paciente de 75 kilos con deficiencias en el Factor VIII, es decir, con hemofilia tipo A, requiere al menos 900 litros de plasma para producir el factor necesario que permita coagular su sangre.
Lo anterior, señaló el directivo de la desarrolladora y distribuidora de medicamentos, representaría alrededor de mil 240 donaciones de sangre, de 700 mililitros cada una, aunado a los riesgos que dicha solución implica, como contraer Hepatitis o VIH y a la escasez de donadores en México.
En este contexto, es necesario contar con un tratamiento que se adapte a las necesidades del paciente, en cuanto a su peso y otras características, y óptimo, que se pueda aplicar en la primera hora a partir de que empiezan a sentir los síntomas de hemorragia.
Así, el nuevo factor antihemofílico recombinante de la firma, denominado Advate, permite el control y tratamiento profiláctico de personas con hemofilia tipo A, para prevenir la frecuencia de episodios hemorrágicos, y que en alrededor de 30 por ciento de los casos llegan a desaparecer.
Con información de Notimex