Con homenajes, exposiciones, re ediciones de sus grandes obras, jornadas de lectura, mesas de análisis, exposiciones y proyección de películas en Argentina, Francia y México, hoy el mundo conmemora el centenario de uno de los escritores más emblemáticos de la literatura latinoamericana: Julio Cortázar.
Aunque Cortázar nació el 26 de agosto de 1914 en Bruselas, Bélgica, mientras su padre realizaba trabajos diplomáticos como embajador, toda su vida se dijo oriundo de Argentina. Por ello, el país sudamericano concentra la celebración más grande con homenajes en Buenos Aires, Mendoza, Azul y Salta.
El Museo del Libro y de la Lengua de Argentina iniciará la celebración con el montaje de la exposición interactiva “Rayuela, una muestra para amar” y un ciclo de jazz en el que distintos músicos interpretarán las piezas favoritas de Cortázar.
Además de un ciclo fílmico de cintas basadas en sus obras y el estreno de la película Historia de cronopios y famas realizada por el cineasta Julio Ludueña, con la participación de artistas argentinos como Carlos Alonso, Luis Felipe Noé, Antonio Seguí, Daniel Santoro y Crist.
La Biblioteca Nacional presentará jornadas de “Lecturas y relecturas de Julio Cortázar”, con la participación de académicos y escritores internacionales cuya finalidad será resaltar el universo literario del escritor.
Las cadenas televisivas de Argentina proyectarán la famosa entrevista que brindó al periodista español Joaquín Soler Serrano en 1977 en el programa A fondo. El Museo Nacional de Bellas Artes expondrá Los otros cielos, una colección personal de Cortázar que incluye documentación, y Los fotógrafos: las ventanas a Julio Cortázar, que muestra la figura del escritor, a través de las miradas de distintos fotógrafos.
Homenajes en Francia y México
Por ser el país donde el escritor vivió desde 1951, Francia se une al homenaje. La Alianza Francesa expondrá Cortázar en líneas, cuyo propósito es exhibir la importancia y reflejo de París en sus obras. En el Salón de París se reunirán 40 escritores para discutir sobre las obras emblemáticas del autor.
Mientras que México rendirá homenaje durante la Feria Internacional del Libro de
Un poco de su vida
Sus obras se caracterizan por un alto nivel intelectual y el tratamiento de emociones. Su primera publicación fue en 1938, con la colección de sonetos Presencia, bajo el seudónimo de Julio Denis.
Años más tarde, las traducciones a las obras de Edgar Allan Poe influyeron en su colección Bestiario, publicada en 1951. Pero su fama aumentó con la publicación de Rayuela, en 1963. A ésta se unieron Final del Juego, Todos los fuegos del fuego, La vuelta al día en ochenta mundos, Último round, entre otras.
Vivió en Argentina, Suiza, España y Francia. Murió el 12 de febrero de 1984 en París, Francia a causa de leucemia.
“No tengo ninguna noción de horarios. Me resulta insoportable. En la época que tenía que ganarme la vida con algo que no tenía que ver con la literatura nunca aguanté los horarios. Siempre busqué un tipo de empleo que supusiera dos o tres horas de trabajo a lo sumo, aunque te pagaran muy poco, porque así salías a la calle y eras tú”.
“Vine a despedirme de mi madre”, dijo Cortázar a los medios en diciembre de 1983, cuando se dejó hacer una sesión de fotos por Dani Yako, quien tomaría su última imagen en Buenos Aires.
“Rayuela significó una fuente continua de sorpresas. Siempre me ha parecido que un libro cumple un ciclo. Si es un buen libro despierta entusiasmo y luego el libro entra en un limbo que ya tiene su lugar en la memoria. En el caso de Rayuela, vengo a descubrir que las nuevas ediciones siguen siendo leídas por los jóvenes”.
“Mis dos primeras grandes influencias fueron Julio Verne y Edgar Allan Poe. Verne me daba por la vía de la lectura todo el contexto de la riqueza planetaria que no teníamos en Buenos Aires”.