El secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet Chemor, dijo a los países de Iberoamérica que con el fin de que las regiones crezcan es necesaria una relación basada en un principio humano fundamental: la cooperación.

 

El titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP) presidió la apertura de la XII Asamblea General de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para la Educación, la Ciencia y la Cultura, durante la cual se renovará la Secretaría General y se elegirá la sede de la XIII Asamblea, a celebrarse en 2018.

 

“Es nuestra hora, las señales para creerlo muestran signos esperanzadores de un cambio de página. En los últimos años hemos dejado de ser testigos para convertirnos en protagonistas”, indicó.

 

“Esta idea supone la importancia de que, además de trabajar de manera cercana, lo hagamos con la intención de compartir las mejores experiencias y, así, ampliar perspectivas, fortalecer sinergias e impulsar logros conjuntos”, comentó.

 

En las instalaciones de la cancillería y acompañado por el secretario general de la OEI, Álvaro Marchesi, y el viceministro brasileño de Educación, Luis Claudio Costa, destacó que emerge en Iberoamérica un hálito de unidad y empuje de los pueblos que la conforman y que afirman, con plena conciencia, su lugar en el mundo.

 

Recordó que hace 75 años un grupo de ministros de Educación se reunió en Madrid para sentar las bases de un plan, en el que se propuso la consolidación de un modo de pensar y ser iberoamericanos.

 

“Durante su existencia, la OEI se ha posicionado no sólo como un organismo de colaboración, sino como un instrumento que posee Iberoamérica para proyectar su diversidad, su fortaleza y, sobre todo, su unidad”, mencionó.

 

Comentó que “la expectativa que tenemos de esta reunión es que nuestra visión sea de largo alcance, conscientes, a su vez, de que la puesta en práctica de los acuerdos requiere un compromiso cotidiano y disciplinado”.

 

“Abrazamos -dijo- principios irrenunciables en nuestros pueblos”: calidad y equidad para la educación a lo largo de la vida, así como la definición de objetivos de la agenda posterior al 2015.

 

Asentó que existe un vasto afluente donde idiomas y visiones convergen en un movimiento siempre abierto al aprendizaje, la comunicación y el enriquecimiento mutuo.

 

Destacó que “somos países hermanos en más de un sentido, pues las costumbres y pensamientos que nos dan sentido nacen de un mismo manantial: una historia compartida”.

 

Finalmente, el titular de la SEP destacó que “podemos ser la referencia para el resto de las regiones del mundo. No hay un proyecto regional tan ambicioso, tan comprometido, tan exigente y tan preciso.

 

“Estamos a las puertas de una responsabilidad histórica a la que debemos responder con determinación”, sostuvo.