SYDNEY. La ex conejita de Playboy, Brandi Brandt, fue sentenciada a hasta seis años de prisión por haber formado parte de una red de narcotraficantes que transportaba cocaína a Australia.
Brandt, quien estuvo casada con el bajista de Motley Crue, Nikki Sixx, se declaró culpable en abril de asociación ilícita para importar drogas. Los fiscales dijeron que fue parte de una mafia que escondió paquetes de cocaína en vuelos de pasajeros de Qantas y United Airlines de California a Sydney en 2007.
Empleados de una compañía de catering para aerolíneas presuntamente recolectaban los paquetes luego que los aviones aterrizaban.
La ex modelo de 45 años, nacida en California, fue acusada de asociación ilícita para importar cocaína entre julio y diciembre de 2007.
El viernes, el juez del Tribunal de Distrito Peter Zahra dijo que el papel de Brandt fue “sustancialmente menor” que el de otros involucrados.
El abogado defensor, Phillip Boulten, pidió misericordia al reconocer que Brandt había tomado algunas malas decisiones, y argumentó que su clienta tuvo una vida difícil mientras crecía en el seno de una familia disfuncional.
“Le ha tocado duro — tuvo una niñez bastante confundida“, dijo a la corte durante una audiencia este mes. “Consumía drogas de adolescente, su padre usaba drogas. … Ella imitó, en cierto modo, el estilo de vida de sus padres”.
En los años que pasaron entre la desarticulación de la red y su arresto y extradición a Australia en el 2013, había reformado su vida, dejado las drogas y consiguió trabajo, dijo Boulten.
“Es poco probable que vuelva a meterse en problemas”, añadió.
Brandt será elegible para recibir libertad condicional en noviembre del 2016. UC NS