La secretaría de Relaciones Exteriores lamentó la decisión de Israel de continuar su expansión ilegal en el territorio palestino de Cisjordania. Israel se anexó 400 hectáreas de terreno en la zona de Belén, el domingo pasado.

 

A pesar de que el gobierno Israelí evacuó sus asentamientos de Gaza en 2005, continúa con una política expansionista en Cisjordania, región que comparte frontera con Jerusalén, precisó la dependencia en un comunicado.

 

La secretaría que dirige el canciller José Antonio Meade instó a Israel a revertir esta nueva ocupación e hizo un llamado a su gobierno a reanudar las negociaciones con Palestina.

 

La SRE lamentó la decisión de Israel de apropiarse tierras en Cisjordania, tal y como lo hicieran el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon y el departamento de Estado de Estados Unidos.

 

La cancillería reiteró que los asentamientos israelíes en los territorios palestinos ocupados son ilegales.

 

Aseguró que es necesario solucionar de fondo el problema en la zona, respetando el derecho tanto de Israel y de los palestinos a vivir en paz y seguridad, con respeto al derecho internacional.

 

La organización israelí “Paz Ahora” (Peace Now), que se opone al expansionismo de su gobierno en Palestina, indicó que esta nueva ocupación es la más grande en los últimos 30 años.

 

Estos asentamientos son una violación directa al Artículo 49 de la Convención de Ginebra que prohíbe a una fuerza de ocupación como Israel, transferir a su propia población civil a territorio palestino. De acuerdo con el Artículo 55, de la Convención de La Haya, la fuerza de ocupación debe salvaguardar a la población civil.

 

Según informó Radio Israel, la expropiación fue una respuesta al secuestro y asesinato de tres adolescentes en junio pasado, cuyos cuerpos fueron encontrados en la ciudad de Hebrón, la más poblada de Cisjordania.

 

Esta acción va en detrimento a la endeble paz entre israelíes y palestinos, luego que el gobierno de Benjamín Netanyahu y el grupo militar Hamás firmaran una tregua el 26 de agosto pasado, tras 50 días de enfrentamientos en el marco de la operación israelí Marco Protector.