Pasa cada cuatro años en Selección Nacional. Después de la Copa del Mundo vienen los primeros partidos amistosos y con ellos la reconstrucción de lo que será el futuro en las representaciones del futbol mexicano y un arquitecto (que nunca llega a levantar la casa que termina, por ser de paja). Adiós han dicho hombres fuertes de la última línea, como Rafael Márquez, sin lugar a dudas uno de los más importantes futbolistas mexicanos de la historia, además de que era el gran capitán; y Carlos Salcido, jugador de probada experiencia internacional.

 

Apenas el sábado pasado ante Chile se dio el primer intento por encaminar a los sucesores: Osvaldo Pantoja, quien no es un jovencito, pues tiene 25 años y es un viejo conocido del Piojo en su lejana etapa con Tecos; Francisco Javier Rodríguez, una garantía cuando está de buenas, aunque desdeñara la capitanía del Seleccionado Nacional; y Miguel Ángel Herrera, central de Tuzos, también con 25 años, y visto por el Piojo desde antes de la Copa del Mundo.

 

Piojo arquitecto sabe la importancia de darse prisa en una misión con miras a la Copa Oro y la Copa América en 2015. Sin Márquez y Salcido, la inconsistencia del Maza Rodríguez no es garantía para recargar el cuadro bajo de los verdes, por lo que le urge encontrar a los que serán los acompañantes del hombre fuerte que le queda en la central, Héctor Moreno, fracturado en el pasado Mundial y al que aún le queda parte de la recuperación, más la puesta a tono para regresarlo al nivel que mostró en el pasado certamen veraniego.

 

La otra opción que parecía segura para la renovación de la zaga está atorada en Portugal, según ha dicho el volante Héctor Herrera: Diego Reyes. El joven central surgido en las Águilas del América ha pasado a ocupar un papel secundario en el once del Porto, tanto que el mismo Herrera, su compañero en el cuadro luso, ha asegurado que Diego está algo desesperado, casi relegado con la llegada del nuevo técnico español, Juan Lopetegui, quien a su llegada al Porto ha llevado un par de centrales que han dejado fuera de las más recientes convocatorias, pero sobre todo de Champions League, al joven central mexicano.

 

Miguel Herrera, al tanto del bache de una de sus promesas, ha puesto en marcha la búsqueda de opciones. Por eso ante Bolivia los nombres en la zaga central serán novedosos en su etapa: Hugo Ayala, Luis Venegas e Iram Mier. Mier tiene 25 años y experiencia en Selección Nacional, lo mismo que Ayala, quien no obstante tener 27 años, ya sabe lo que es jugar con el Tri. Lo difícil de entender es lo de Luis Venegas, quien a sus 30 años debutará con la Selección. ¿No que se busca renovación de cara al Mundial en cuatro años, cuando Venegas, aunque impresione ante los bolivianos, tendrá nada menos que 34 años, uno menos de los que hoy tiene el retirado y laureado Rafael Márquez?