LOS ANGELES. El decomiso de más de 65 millones de dólares y la detención de nueve personas relacionados con el lavado de dinero para cárteles mexicanos, principalmente el de Sinaloa, fue el resultado de un operativo realizado ayer en Los Angeles, California. Las acciones continúan, pues buscan a más involucrados, tres de ellos estarían en México.
Más de mil policías participaron en el operativo efectuado principalmente en el Distrito de la Moda, área donde se incrementó el lavado de dinero desde 2010, cuando México aprobó regulaciones financieras, dijo Robert Dugdale, asistente del jefe de la División Criminal del Oficina del Procurador General.
El Operativo Fashion Police se deriva de un trabajo de meses de investigación que incluyó la infiltración de agentes del Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) y de la Oficina de Incautación y Bienes (ICE).
Los oficiales encubiertos entregaban paquetes de dinero en efectivo, a veces en bolsas de supermercado, a tiendas en el Distrito de la Moda, incluso contando a los dueños de negocios que el dinero provenía del narcotráfico.
Los acusados lavaban dinero obtenido de la venta de cocaína, heroína y metanfetamina a través de mercancía que era enviada de Estados Unidos a México. Las transacciones eran realizadas por intermediarios, que luego de vender los bienes en México, entregaban el dinero a los cárteles.
De esta manera, el dinero probablemente derivado de venta de drogas no salía de Estados Unidos sino que era usado para comprar más bienes, a través de tiendas como las del Distrito de la Moda, y así completar el círculo del lavado del dinero, de acuerdo con las autoridades.
Al tener las tiendas plenamente investigadas, y con tres acusaciones presentas, se emitieron decenas de órdenes de arresto y cateo para que este miércoles pudieran entrar para decomisar los ingresos identificados como provenientes del crimen organizado. Confiscaron 35 millones de dólares en efectivo, así como 30 millones de dólares más en cuentas bancarias.
Nueve personas fueron detenidas. Otras más, no se especificó cuántas, son buscadas, entre ellas tres que estarían en México.
La procuradora general de California, Kamala Harris, consideró el hecho como un “golpe probablemente histórico” contra el narcotráfico.
“Esto va a crear un enorme hoyo en las operaciones de estas organizaciones criminales transnacionales, va a debilitarlos de manera significativa”, dijo Harris en una conferencia de prensa.
Dugdale dijo que además del Cártel de Sinaloa probablemente otros cárteles mexicanos estaban involucrados, pero no dio más detalles porque la investigación continúa.
Entre las acusaciones que existen una que indica que el Cártel de Sinaloa usó un negocio para aceptar y lavar dinero proveniente de pagos por el rescate de un estadounidense plagiado. El secuestrado, un ex distribuidor de drogas, fue tomado como rehén y torturado en un rancho en Culiacán, Sinaloa, dijeron las autoridades.
Los familiares del rehén pagaron un rescate de 140 mil dólares, que entregaron al negocio en el Distrito de la Moda y que luego fue repartido a otros locales de la zona en montos menores para evadir a la ley y a las autoridades, de acuerdo al expediente.
Los Angeles se ha convertido en el “epicentro” del lavado de dinero del narcotráfico, agregó Dugdale, por lo que las autoridades también están enfocando sus esfuerzos en esta zona.
El Distrito de Modas y otras zonas financieras con gran presencia hispana han servido para lavar dinero desde hace mucho tiempo, agregó Dugdale, pero este intercambió ilícito ha aumentado desde el 2010, cuando México aprobó regulaciones financieras.
Desde entonces, cárteles han buscado otras maneras de lavar dinero, una de las cuales como lo están haciendo en Los Angeles, que fue lo que los cárteles colombianos hicieron otrora, agregó Dugdale. (con información de AP y Los Ángeles Times)