DALLAS. Apple, el gigante de la tecnología, informó ayer que impuso una nueva marca al vender más de 10 millones de unidades de sus teléfonos inteligentes iPhone 6 y 6 Plus en los tres primeros días que estuvieron disponibles en las tiendas.
La cifra supera los nueve millones de iPhones que Apple vendió el año pasado en el primer fin de semana que estuvieron a la venta sus modelos iPhone 5 y iPhone 5 C.
“Las ventas del iPhone 6 y el iPhone 6 Plus superaron nuestras expectativas para el fin de semana de lanzamiento, y no podríamos estar más felices”, dijo el presidente y director general de Apple, Tim Cook, en un comunicado.
La marca de ventas se alcanzó aun cuando los iPhone 6 y el iPhone 6 Plus solo están disponibles, hasta ahora, en una decena de países: Estados Unidos, Australia, Canadá, Francia, Alemania, Hong Kong, Japón, Puerto Rico, Singapur y el Reino Unido.
Sin embargo, los aparatos llegarán también a 20 países más el próximo 26 de septiembre y Apple asegura que para cuando termine el año, ya se venderán en un total de 115 países.
El nuevo récord de ventas del iPhone 6 se ha logrado sin incluir al mercado chino, que supone uno de los más grandes para el dispositivo de Apple y donde este teléfono todavía no está disponible a falta de la aprobación definitiva por parte de las autoridades.
La actualización más notable en los dos modelos del iPhone 6 son las pantallas más grandes en ambas versiones, muestra de que Apple cedió a la tendencia encabezada por competidores como Samsung que han hecho de las pantallas más grandes una característica estándar en sus teléfonos.
Por tanto, los nuevos teléfonos de Apple, de 4.7 y 5.5 pulgadas (11.9 y 13.9 centímetros) son los más grandes fabricados por la compañía hasta la fecha, y su precio va de 199 a 499 dólares.
Ejecutivos de Apple informaron que los nuevos teléfonos vienen con muchas mejoras, incluyendo procesadores más rápidos, una pantalla más nítida, mejor duración de la batería y mejora en el rendimiento de la cámara.