Al igual que en los estados de Oaxaca y Michoacán, en el Distrito Federal no se armonizarán las políticas locales con la Reforma Educativa, al menos para las preparatorias financiadas por el gobierno capitalino, acordaron el Sindicato Único de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior (SUTIEMS) y el Gobierno del DF (GDF).
La secretaria general del sindicato de las preparatorias capitalinas, Mónica Ramírez Vázquez, aseguró a 24 HORAS que la condición para conjurar la huelga que inició el martes pasado a las 06:00 horas fue el compromiso de GDF de que los maestros podrán seguir autoevaluándose y que la asignación de plazas en el IEMS no se sujetará a los resultados de evaluaciones externas, sino del contrato colectivo de trabajo.
“Más que armonizar estamos hablando de generar las líneas legales y constitucionales de cómo nosotros propondríamos una manera de reforma educativa, como lo ha hecho los gobiernos de Michoacán y Oaxaca”, dijo en entrevista.
Para “conjurar” la huelga, el acuerdo al que llegaron el SUTIEMS y la Secretaría de Gobierno del DF es la firma de un convenio a través del cual el sindicato participará en la conformación de la ley educativa durante la redacción de la Constitución del DF; el sindicato entraría “directamente” en la discusión del tema.
“El GDF se ha pronunciado por considerarnos como interlocutores. En la Constitución del DF nosotros estaríamos participando de manera directa y se comprometen a que en cualquier cambio hacia contrato o a la ley de Educación, nosotros estaríamos presentes”.
Por la tarde, el GDF anunció que en este acuerdo al que llegó con el SUTIEMS para levantar la huelga dará seguridad labora la los trabajadores y defenderá los “derechos laborales conquistados” y, en el marco de la reforma política del DF se coordinará con ese para que “cualquier cambio no afecte los derechos laborales, en particular los establecidos en el contrato colectivo o el modelo educativo” del Instituto de Educación Media Superior.
El martes a las 06:00 de la mañana, cerca de 900 trabajadores del SUTIEMS estallaron en huelga y clausuraron los 20 planteles de las preparatorias del Distrito Federal,dejando sin clases a más de 24 mil estudiantes.
Entre sus demandas estaban la reincorporación de tres trabajadoras administrativas que habían sido despedidas, la basificación de cerca de 80 trabajadores y, principalmente, su inconformidad ante la aplicación de evaluaciones por parte del Instituto Nacional de Evaluación de la Educación (INEE) de sus maestros.
Actualmente, los maestros son evaluados con los criterios del sindicato en una comisión mixta, integrada por miembros del IEMS y de la unión de trabajadores, en una especie de “auto-regulación”.
Sin embargo, a partir de la entrada en vigencia de la reforma educativa, esta evaluación ya estaría a cargo del INEE y no de ellos mismos; a partir del examen de oposición (que califica de acuerdo con un estándar determinado por el Instituto la idoneidad de un profesor para dar clases) se asignarían las plazas, no por acuerdos sindicales.
“La evaluación de la reforma es a través de exámenes de oposición. Esta reforma es laboral, no está preocupada por el aprendizaje y a nosotros ni siquiera nos conviene laboralmente (…) en el gobierno de Michoacán y de Morelia se están presentando vías alternas. Eso es lo que nosotros hemos propuesto”.