Lo pueden atestiguar muchos hijos de migrantes latinoamericanos nacidos en Estados Unidos, que conocen perfectamente las palabras en español para lo que pasa en una cocina, pero carecen del vocabulario para la ciencia.
Las tornas están cambiando en Estados Unidos con el aumento ininterrumpido de los hispanohablantes, pero al sur del río Bravo la situación es la inversa, con el español como idioma de prestigio y las lenguas indígenas sobreviviendo en espacios culturales reducidos.
Internet, un creador y difusor incomparable de términos originados en inglés, es al mismo tiempo una herramienta para preservar la diversidad lingüística.
Más útiles
No se trata tan solo de la posibilidad de colgar guías de aprendizaje o grabaciones de hablantes de lenguas como el mazateco, el kichwa o el nawat pipil, sino de hacerlas más útiles al adaptarlas al ecosistema virtual.
Una de las iniciativas en ese sentido es la elaboración de la versión en guaraní del navegador Firefox, que se lleva a cabo actualmente en Paraguay.
Una veintena de estudiantes voluntarios de la Universidad Nacional de Asunción se reúne semanalmente para traducir unas 40 mil palabras.
Ese es el léxico de los menús, los mensajes de error, herramientas de desarrollo y páginas que forman parte del navegador, dijo a Efe Jeff Beatty, ingeniero de “localización” de Mozilla, la entidad sin ánimo de lucro que produce el Firefox.
Ese glosario requiere acuñar términos que hasta ahora no tienen nombre en guaraní, como el concepto “restaurar sesión”, traducido como mboyevy, que significa “hacer que vuelva el trabajo”, según Domingo Aguilera, un experto de la Secretaría de Política Lingüística de Paraguay, que participa en el proyecto.
Aguilera dijo a Efe que tratan de generar las expresiones desde dentro del propio guaraní, en lugar de simplemente adoptar la palabra en español o inglés.
Con esta iniciativa buscan “instalar la lengua guaraní en ámbitos no habituales y garantizar su supervivencia”, explicó.
Aunque el guaraní es hablado por el 90% de los paraguayos, según el censo de 2012, y es la segunda lengua oficial de país, junto con el español, aún está vinculado a ciertos sectores “a la ruralidad y marginalidad”, dijo Aguilera.
Perfil moderno
El proyecto permite darle la potencialidad de un uso más amplio y “un perfil moderno”, dijo.
La red social Facebook también ha lanzado un proyecto para traducirse al guaraní, que aun no ha concluido. En ese caso lo costea la empresa de telefonía Tigo, en lugar de realizarse con voluntarios, aclaró Aguilera.
Mozilla, dado su carácter de fundación, apuesta por la colaboración con las propias comunidades de hablantes, que componen los equipos que trabajan en versiones de Firefox para computadores y aparatos móviles en 230 lenguas.
Incluyen voluntarios que adaptan el español a la forma de hablar en cada país. Por ejemplo, el sistema operativo en México usa el “tú”, mientras que en otras naciones emplea el “usted”.
México, que tiene la mayor población nativa de América Latina, es donde hay más iniciativas sobre lenguas indígenas. Como en guaraní, en esas versiones los traductores tienen que incorporar nuevos conceptos.
Guillermo Movia, que coordina los equipos de voluntarios en Latinoamérica, citó como ejemplo la dificultad de traducir “ventana” al zapoteco, porque en las casas de ese grupo indígena no las hay, lo que se resolvió con el uso de la palabra nativa para “ojo”, explicó a Efe.
Al fin y al cabo, emplear “ventana” para designar a los espacios que abre un programa informático y que se pueden mover dentro de la pantalla es también una metáfora, como ojo.
Un desafío mayor para preservar esas lenguas es fomentar la generación de contenidos en internet porque no basta con poder operar un buscador en zapoteco si no hay nada que encontrar.