El café es una de las bebidas de mayor consumo en el mundo y hasta hoy sus efectos en la salud han formado parte de un debate muy controvertido. El cual ha llegado a una respuesta general de que su consumo es beneficioso siempre y cuando se tome con moderación.

 

Según la investigación de la doctora Ruth Pedroza, investigadora de la Universidad Iberoamericana, el beneficio de consumir esta bebida está relacionado con la prevención del riesgo de padecer enfermedades crónicas, entre las que se encuentran las cardiovasculares.

 

Ella recaba datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que estiman que en el año 2030 morirán alrededor de 23.3 millones de personas por enfermedad cardiovasculares, sobresaliendo las cardiopatías y el accidente vascular cerebral (AVC).

 

Pedroza toma como referencia estudios a grandes grupos de individuos en Japón y Estados Unidos, a los que se sometieron a diferentes grados de exposición al café y se valoró la posible relación existente entre el consumo de esta bebida y algunas enfermedades.

 

En Japón se realizó un estudio durante 13 años, con un seguimiento de un millón 66 mil 718 personas de entre 40 y 69 años, en el que los resultados señalaron que el consumo de café puede reducir el riesgo de infarto cerebral al mejorar los niveles de glucosa en la sangre, ya que la presencia de valores elevados de este azúcar, es un factor de riesgo.

 

Además se encontró que el consumo de café más de tres veces por semana contribuye a reducir el riesgo de accidentes vasculares cerebrales, enfermedades cerebrovasculares y de enfermedad coronaria.

 

Por otra parte, en Estados Unidos, se midió el consumo en 83 mil 76 mujeres durante 24 años, que arrojó  asociación inversa entre el consumo de café y el riesgo de AVCs.

 

Sin embargo, no hubo asociación para los individuos que, aunque bebían café, fumaban o padecían de obesidad. Es decir, al menos para el tabaquismo, el café no puede contrarrestar los efectos negativos que éste produce en el organismo.

 

Se cree que algunas sustancias del café como el ácido clorogénico, el ácido ferúlico y el ácido p-cumárico entre otras, tienen efectos benéficos en el metabolismo de la glucosa, en la inflamación y en la disfunción endotelial que se considera una de las primeras manifestaciones de la enfermedad cardiovascular y la arteriosclerosis.

 

Un estudio de meta-análisis entre 2001 y 2011 que incluyó a 140 mil 220 participantes divididos en grupos de individuos sanos e individuos con historial de infarto al miocardio, encontró que el consumo de cuatro tazas de café al día tenían una fuerte asociación inversa con las fallas cardiacas.

 

Aunque los resultados de las investigaciones puedan demostrar que el consumo del café es beneficioso para la salud, es importante señalar que benéficos que  estos efectos serán limitados si no se tiene un estilo de vida saludable, o el individuo no evita hábitos como fumar o beber alcohol.