SUZUKA, Japón.- El piloto francés Jules Bianchi, de la escudería Marussia, lucha por su vida en un hospital de la ciudad japonesa de Mie, en el que fue operado de graves lesiones en la cabeza como consecuencia de un accidente sufrido durante el Gran Premio de Japón, disputado en Suzuka y en el que impactó con violencia contra una grúa que retiraba otro vehículo accidentado.
A causa del mal estado de la pista, con mucha agua acumulada por la intensa lluvia que acompañó la disputa de toda la carrera, Bianchi, de 25 años, perdió el control de su Marussia-Ferrari, que acabó impactando contra una grúa que retiraba el Sauber del alemán Adrian Sutil.
En la cuadragésima segunda vuelta, Sutil hizo un trompo y chocó contra la barrera de neumáticos en la salida de la curva siete. Los comisarios desplegaron dobles banderas amarillas antes de la curva para advertir a los pilotos del incidente.
Una grúa fue enviada para levantar el coche y trasladarlo a un sitio seguro, detrás del muro de protección. Mientras esto sucedía, Jules Bianchi perdió el control de su monoplaza, se salió por la escapatoria y golpeó la parte trasera del pesado vehículo.
Una vez que los comisarios advirtieron de que el piloto estaba herido, fueron desplegados equipos médicos y entró en pista el coche de seguridad. Luego, un equipo para sacar a Bianchi del vehículo y una ambulancia.
El piloto de la academia de jóvenes pilotos de Ferrari cedido como titular a Marussia fue sacado de su coche, trasladado al centro médico del circuito y, posteriormente, en ambulancia, al Hospital general de Mie.
El escáner al que se sometió revela que Bianchi sufre importantes lesiones en la cabeza, informó la FIA (Federación Internacional de Automovilismo), lo que obligó a someter al piloto a una operación de urgencia para luego pasar a la unidad de cuidados intensivos para mantenerlo en observación.
El responsable de prensa del equipo Ferrari informó de que la operación de Bianchi concluyó y que, tras la misma, el piloto no necesitó respiración asistida.