SAN FRANCISCO. Bryce Harper pegó un grito de felicidad cuando cruzó el plato al poner a Washington finalmente con la ventaja. Después de ese juego de extra innings que acabó en la madrugada del domingo, un largo viaje a la otra costa del país y estar al borde de la eliminación, los Nacionales siguen con vida.

 

Doug Fister lanzó siete innings sin tolerar carreras y los Nacionales capitalizaron el mal tiro de su estelar abridor Madison Bumgarner a la tercera base para vencer ayer 4-1 a los Gigantes de San Francisco en el tercer juego de la serie de división de la Liga Nacional.

 

Fister brilló otra vez en San Francisco, esta vez en un sensacional duelo de lanzadores con Bumgarner, resuelto cuando los Nacionales lograron romper un embrujo de 21 innings sin fabricar carreras.

 

Washington anotó dos veces tras el error de Bumgarner, mientras que Bryce Harper coronó la victoria con un descomunal jonrón solitario en el noveno.

 

Drew Storen permitió que los dos primeros bateadores se embasaran en el noveno y le anotaron una carrera, pero pudo zafarse de sus amargas experiencias en la postemporada al asegurar la victoria que obliga a un cuarto juego el martes por la noche.

 

Matt Williams, el mánager novato de los Nacionales, se mantuvo fiel a la alineación artífice de una campaña regular de 96 victorias, luego de un par de derrotas por una carrera en los primeros dos partidos ante los Gigantes.

 

El duelo del sábado, que terminó en la entrada número 18, empató la marca de más entradas en postemporada y fijó un nuevo récord de tiempo con 6 horas y 23 minutos. Los equipos se combinaron para utilizar 17 lanzadores y 24 jugadores de posición. Ahora, los Nacionales buscarán nivelar la serie con el zurdo Gio González en el montículo frente al derecho Ryan Vogelsong.