A tres semanas del Impacto del huracán Odile en Baja California Sur, el Presidente Enrique Peña Nieto consideró que la etapa de emergencia fue superada en los cinco municipios de la entidad.

 

Tras encabezar una reunión de evaluación en Los Cabos, la localidad más afectada por el fenómeno climático, el mandatario señaló que el gobierno federal continuará con el apoyo para la reactivación económica y reconstrucción de la infraestructura dañada.

 

Al restablecerse el suministro de servicios básicos, principalmente energía eléctrica y agua, las tareas del gobierno se centrarán en “respaldar la labor de los propios ciudadanos de Baja California Sur para que regresen a su actividad económica y habitual de manera normal y ordenada”.

 

El Presidente resaltó la coordinación con el gobierno estatal, que dijo, permitió atender la emergencia a pocas horas del impacto del huracán con evacuación de turistas mediante un puente aéreo, reforzamiento de la seguridad, abastecimiento de alimentos y agua así como la instalación de albergues.

 

El plan implantado ante la contingencia, “permitió tener prácticamente un saldo blanco del efecto del huracán Odile, lamentablemente fallecieron algunas personas en algunas partes del estado, no en esta región, pero realmente las personas que se encontraban en zonas de mayor vulnerabilidad fueron desplazadas, llevadas a albergues”.

 

A 22 días de que Odile azotará las costas de Baja California Sur, el mandatario visitó por cuarta vez la entidad informó que en una cifra preliminar los daños ascienden a 7 mil 870 millones de pesos.

 

El mandatario, ante parte de su gabinete, reconoció los trabajos de ayuda a la población por parte de la Comisión Federal de Electricidad, la Comisión Nacional del Agua y las fuerzas armadas durante la etapa de mayor contingencia.

 

Para mediados de noviembre, explicó la secretaria de turismo, Claudia Ruiz, prevén que funcionen 9 mil de las 15 mil habitaciones de hotel de Los Cabos.

 

Durante las tareas de rehabilitación se elaboró un censo que dio como resultado un total de  mil 800 casas dañadas, las cuales, en su mayoría tendrán que ser reubicadas porque se encuentran en zonas de alto riesgo.

 

Además, Peña Nieto entregó los primeros apoyos económicos a 500 pequeños y medianos empresarios que resultaron afectados tras el paso del huracán.