RÍO DE JANEIRO. El Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil espera que el domingo, cuando los electores acudirán a las urnas para elegir al presidente del país en segunda vuelta, los votantes no enfrenten tantos problemas con el sistema de voto por reconocimiento de huella dactilar como en la primera ronda.
La eficacia del sistema de votación con huella dactilar fue del 91.5% en la primera vuelta y la previsión es que ese porcentaje se ubique por encima del 95% en el balotaje, afirmó el secretario de Tecnología de la Información del TSE, Giuseppe Janino, citado por la oficial Agencia Brasil.
El sistema de identificación de votantes con huella dactilar causó retrasos y molestias al electorado en algunas ciudades durante la primera vuelta, el 5 de octubre pasado, debido a problemas técnicos y a la falta de familiaridad de los votantes con el sistema.
Según el tribunal, además de las fallas técnicas, algunos de los encargados de orientar a los votantes sobre el uso de este tipo de urnas en los colegios electorales no realizaron su trabajo de forma eficiente, lo que también causó disgusto en los votantes.
Estos problemas provocaron retrasos en varios colegios electorales de Brasil, en los cuales se registraron filas para votar de hasta dos horas.
El sistema conocido en Brasil como “biométrico” fue utilizado en 764 municipios brasileños, en los cuales estaban llamados a votar 21 millones de ciudadanos, un 15 % del electorado del país.
Por otra parte, la presidenta brasileña y candidata a la reelección, Dilma Rousseff, supera por apenas un punto porcentual al opositor Aécio Neves, según un sondeo divulgado
La encuesta fue realizada por la empresa MDA por encargo de la patronal Confederación Nacional del Transporte (CNT) y le atribuye a Rousseff una intención de voto del 45.5%, frente al 44.5% que le adjudica al opositor socialdemócrata.
Según MDA, si se toman en cuenta solamente los votos válidos, lo que supone excluir a los electores que declararon su intención de votar en blanco o nulo, Rousseff cuenta con un 50.5%, en tanto que Neves llega al 49.5%.
La encuesta tiene un margen de error de 2.2 puntos porcentuales, por lo que MDA indicó que ambos candidatos se encuentran en una situación de “empate técnico”.
En la primera vuelta del pasado 5 de octubre, Rousseff se impuso con el 41.5% de los votos, frente al 33.5% que obtuvo el senador socialdemócrata.
Dos sondeos divulgados la semana pasada de cara a la segunda vuelta le atribuyeron a Neves una intención de voto del 51%, mientras que cifraron el apoyo a Rousseff en un 49%, lo que también configuraba un “empate técnico”.
Este ha sido la primera encuesta realizada por MDA con miras a la segunda vuelta, con lo cual la empresa no cuenta con parámetros para indicar las variaciones del apoyo a ambos candidatos.
Neves se mete en la pelea
BRASILIA. Conquistar al 6% de los electores indecisos en los próximos cinco días. Ese es el desafío que enfrentan los dos candidatos a la presidencia de Brasil, Aécio Neves, del Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB) y la actual mandataria Dilma Roussefff, quien a pesar de que en su campaña se esfuerza en señalar los errores cometidos por Neves cuando era gobernador en Minas Gerais, hace cinco años la visión que tenía sobre su actual rival era distinta.
El equipo de Neves, gobernador entre 2003 y 2010, difundió un spot con el audio de una entrevista televisiva en la que Rousseff elogia al candidato del PSDB y lo califica como uno de los mejores gobernadores de Brasil. En la emisión, hecha en febrero de 2009, Rousseff responde preguntas como ministra de Casa Civil y la elegida por el ex presidente Luiz Inácio Lula Da Silva para sucederlo.
“En primer lugar, Aécio Neves es, sin lugar a dudas, uno de los mejores del país. Segundo, encuentro que el gobernador tiene una forma de hacer política y de relacionarse que creo que es ejemplar”, afirma la mandataria. Al final del anuncio, el locutor dice que la gestión de Neves fue tan buena que goza de 92% de popularidad y que “hasta Dilma la aprueba”.
En la noche del domingo, los dos candidatos se midieron por tercera vez en un debate, esta vez televisado por el canal Record. “Las personas están asustadas por la inflación”, que roza el límite máximo de la meta anual del 65%, aseveró Neves, quien preguntó varias veces a Russeff si el gobierno tenía el control inflacionario.
La mandataria aseguró que su política económica mantenía el control de la inflación, sin necesidad de “disminuir” los empleos, y calificó de “arriesgada” la meta propuesta por Neves en un eventual gobierno, con un objetivo del 3%. “Tengo la seguridad de que la inflación está bajo control y eso es inequívoco”, manifestó la jefa de Estado.
El escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras no escapó a las discusiones, pero Rousseff evitó responder directamente a la pregunta de si confiaba en el tesorero del PT, Joao Vaccari Neto, señalado de recibir las coimas del esquema de que supuestamente favorecían a esa formación política.
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