Este domingo se cumple un mes de la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, en Iguala y las autoridades siguen sin tener una respuesta sobre el paradero de los jóvenes. La exigencia nacional e internacional porque aparezcan vivos se ha incrementado en los últimos días, incluso el plazo dado a la autoridad por los padres y normalistas ha vencido y las protestas se radicalizaron en la última jornada.
Las autoridades federales, a cargo de las indagatorias, trabajan en la identificación de 38 cadáveres hallados en distintas fosas clandestinas descubiertas como parte de las brigadas de búsqueda de autoridades y policías comunitarios de la UPOEG. Si bien hay alrededor de 28 fosas encontradas hasta ahora en Iguala, la autoridad reconoce solo 11 hasta ahora.
Hasta ahora no se tiene rastro de los 43 jóvenes que la noche del 26 de septiembre y madrugada del 27, fueron atacados por policías municipales, hechos en los que se ultimaron a 3 normalistas y a otros 3 civiles, se hirieron a 30 personas y que hoy son clamados de vuelta. De acuerdo con los avances de las indagatorias oficiales habrían sido entregados al grupo criminal Guerreros Unidos, en Iguala. Sin embargo sigue sin estar claro el porqué se los llevaron.
La Procuraría General de la República (PGR), dijo que el ataque, en el que hubo seis muertos, fue ordenado por el ahora prófugo alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velásquez, porque temía que los estudiantes fueran a boicotear un acto público de su esposa.
Por su parte, los padres de familia y compañeros de los 43 jóvenes desaparecidos exigieron al gobierno federal redireccione las líneas de investigación y profundice en los nexos de los policías que participaron en los hechos, ya que aseguran, tras haberse reunido con el procurador Jesús Murillo Karam éste les dejó ver que las indagatorias relacionan los hechos con la delincuencia organizada y criminalizan a los estudiantes, lo que rechazaron totalmente.
Asimismo exigieron que sea el propio presidente, Enrique Peña Nieto, quien los reciba y los escuche. Emplazaron que a más tardar este domingo las autoridades den alguna señal de respuesta a sus demandas.
Radicalizan protestas
Estudiantes de las Normales de Ayotzinapa radicalizaron sus protestas para exigir la presentación con vida de sus 43 compañeros. Fue en la ciudad de Chilpancingo este sábado.
Los normalistas también hicieron destrozos en otros establecimientos y convocaron a la gente a tomar la mercancía que quisieran de manera gratuita.
Los maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) se deslindaron de los hechos.
Blindan Guerrero
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Guerrero puso en marcha un operativo de resguardo y disuasión, en el que participan mil 500 elementos antimotines y operativos con la intención de evitar que haya más saqueos.
La dependencia indicó que los elementos resguardan instalaciones estratégicas y de alta concentración social en las principales ciudades del estado, principalmente en Chilpancingo, Acapulco y Zihuatanejo.
La Fiscalía General del Estado inició las investigaciones correspondientes por lo actos vandálicos, de rapiña y daños ocasionados por un grupo de personas en distintas tiendas comerciales.
Suman 11 fosas halladas
La PGR informó que hasta el momento tiene registro de la localización de 11 fosas clandestinas en el municipio de Iguala, en donde tras conocer las acciones de búsqueda se han encontrado en su totalidad 38 cuerpos.
La dependencia federal dijo que las fosas halladas por policías comunitarios en los últimos días corresponden a las mismas que ya habían sido descubiertas por las fuerzas federales.
En tanto precisó que mantendrán las labores de búsqueda, así como un nuevo análisis de los cadáveres para dar con la posible identidad de los cuerpos
Cabe recordar, que el 4 de octubre, una semana después de las desapariciones, las autoridades de Guerrero exhumaron las primeras seis fosas, que fueron localizadas gracias a las declaraciones de uno de los detenidos por los ataques contra los estudiantes. Una de las fosas se hallaba vacía y en las otras cinco se encontraron 28 cadáveres.
Los cuerpos, según informó entonces el fiscal del estado, Iñaky Blanco, estaban calcinados: Los habían colocado en una cama de ramas, regado con combustible y prendido fuego.
Una semana después, el entonces gobernador guerrerense Ángel Aguirre dijo que esos 28 cuerpos no eran de los estudiantes, declaraciones que suscribió más tarde el fiscal general, Jesús Murillo Karam.
Convocan a nuevo paro nacional
Estudiantes de más de 80 universidades de todo el país, agrupados en la Asamblea Interuniversitaria convocaron a un paro nacional del sector educativo el próximo 5 de noviembre.
Los estudiantes exigen con vida de los 43 normalistas y el castigo a los culpables de ese “crimen de Estado”.
“La masacre contra Ayotzinapa es un crimen de Estado, una muestra de la profunda putrefacción de las instituciones políticas en el país. La violencia y la miseria generalizadas en el territorio y entre la población, como lo muestra el caso de Tlatlaya, exhibe que este caso no es aislado, y la responsabilidad de esta tragedia nacional está en los tres niveles de gobierno”, detallaron.
El pasado 22 de octubre, los estudiantes realizaron una marcha bajo el lema “Una luz por Ayotzinapa”. Del monumento del Ángel de la Independencia hacia el Zócalo de la Ciudad de México.
El pasado 26 y 27 de septiembre, seis personas murieron, 25 resultaron heridas y 43 desaparecidas en la ciudad de Iguala, Guerrero, tras ser atacados por policías municipales. Entre las víctimas mortales se encuentran estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y civiles entre ellos un futbolista de Tercera División, menor de edad.