MÉRIDA. Defensora de su raza, pero sobre todo de la mujer, la escritora maya Sol Ceh Moo ve en el Premio Nezahualcóyotl de Literatura en Lenguas Mexicanas, su propio proceso de reivindicación para las mujeres y los mayas peninsulares.
Rebelde en su obra y en su vida personal, la creadora maya se opone a los cánones establecidos por la “literatura occidentalizada” que empuja a los creadores indígenas a limitarse al relato breve o la poesía.
Por ello, orienta su esfuerzo a la novela, donde sus personajes principales son mujeres que se oponen a su destino, señaló la ganadora del Premio Nezahualcóyotl de Literatura en Lenguas Mexicanas 2014, que le será entregado el 7 de noviembre.
En entrevista con Notimex, Sol Ceh Moo destacó que la obtención de esta nominación “significa algo trascendental que me ayuda a demostrar al estado (Yucatán), al país, que siendo mujer no tengo ninguna limitación”.
Permite demostrar, continuó, que no existe alguien que puede decirle a ella que no tiene ni la habilidad ni la capacidad para elaborar obras de calidad.
“El recibir el Neza me compromete más con la sociedad y la etnia maya para obras que puedan sobresalir y resplandecer en otros medios, en otros niveles”, explicó.
“Tenía una meta enfrente: abrir espacios, una puerta para que las personas que tengan temor y piensan que no son capaces de hacerlo porque alguien los han humillado, discriminado, que nos son capaces porque son mujeres, simplemente yo les dije que iba a abrir estas puertas y con el premio Neza ya les he cumplido”, enfatizó.
Refirió que “así, ellas pueden comprender que una mujer como yo que no es apreciada, no es esperada, no es ovacionada, no es recibida de la mejor manera en el estado de Yucatán como creadora, hoy día recibe una de las presea más importante en la literatura de México”.
Y es que definidas por ella misma “la esencia general de las obras de Sol Ceh Moo siempre han sido de exigencia, de grito, de lucha, de reivindicación social y cultural”, como en “Teya, un corazón de Mujer”.
“Es tan marcada la situación discriminatoria que existe en Yucatán y en todo México que no puede ser posible que permanezcamos en silencio; por eso las obras mías son de grito, son de denuncia, son de desesperación, son de ya no calles más”, resaltó.
“Estamos en un periodo de exigencia, de lucha y no soy exclusiva de nadie, mientras exista la libertad de prensa en México lo voy a hacer. Si alguien me dice que no existe la libertad, entonces que me lo demuestre y me amparo y continúo”, aseveró.
Como escritora, reiteró que los creadores en esta lengua no deben minimizarse, ya que no sólo cuentan con las mismas herramientas que sus similares en lengua castellana, sino que además de escritores, también son traductores.
Advirtió que no es una escritora exclusiva en lengua maya, sino bilingüe: “somos capaces de escribir en las dos y todavía somos traductores. Para mi es importante que se reconozca que somos capaces de generar estas obras, como el caso mío, para seguir escribiendo novela, ensayo, crónica”.
Como mujer, mujer maya expuso que “hay personas que me han dicho no te da miedo esa gente y les digo: mi padre me enseñó a no tener miedo, a no temerle a él, a no temerle a la noche”.
Sin embargo, comentó, luego le dijo que como había nacido mujer debía aguantar todo lo que me correspondía, por haber nacido así, entonces ella se dio cuenta que la estaba haciendo menos “y yo no me podía reflejar en él”.
“Nunca vas a poder espejearte en mí porque yo soy hombre y tu mujer –dijo- y desde ese momento, a mis 14 años le entendí y le dije: ¿Sabe qué? le prometo que me voy a espejar de usted”, añadió.
Ceh Moo, quien trabaja en el desarrollo cultural de los municipios en la Secretaría de la Cultura y las Artes, reiteró su compromiso: “me interesa mucho el crecimiento de este pueblo, para que dejen de ser gente a la que toman como mínima o el lumpen de la sociedad porque no lo son.
Respecto de la novela “Solo por ser mujer”, con la actual obtuvo el premio Nezahualcóyotl 2014, recordó que ésta narra la historia de una mujer indígena.
“Como yo, pero una mujer más cerrada de mentalidad, más humilde y que se transformó en un objeto cuando fue vendida al hombre que se hizo su marido, pero ante de ello se hizo su dueño”, mencionó.
Basada en un caso real, refiere que “la trataba como un animal y cuando él murió y la llevaron a prisión y ella simplemente decía yo no lo maté, simplemente él se murió solito porque no aguantó, él se mató, cayó sobre el cuchillo mientras ella pelaba naranjas. Trataba de defenderse en el tzotzil y no le entendieron”.
Selena se preparaba bien para cantar en español, más no hablaba el español. El hecho de que se domine una parte de una canción, no quiere decir que se hable el idioma y esa es la confusión que se le presentó a Honorina.
Fue llevada a prisión y se le acusó de estar mintiendo, de encerrarse en su idioma para no poder declarar y decir las cosas que habían sido ciertas, y su doble acusación y su doble castigo fue el haber sido indígena y ser mujer.
Por eso, “yo les enseño a decir que no, porque no estoy de acuerdo, porque no vas a volver a humillarme y no me vas a volver a utilizar. Voy a hacer lo que pienso, lo que quiero y lo que siento, lo que a mi convenga. Por ello simplemente soy parte de ellos, así quiero que lo sigan sintiendo. Soy Sol y punto”.
El certamen fue convocado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, a través de la Dirección General de Culturas Populares, y fue fallado por un jurado integrado por Benito Taibo, Javier Castellanos y Patrick Johansson, que considera que el Ceh Moo “posee el dominio de los giros literarios del español y maya”.
Otras obras son “Pay wakaxil” (Torero) 2007; “X-Teya u puksi’ik’al ko’olel” (Teya, un corazón de mujer) 2008; “Jats’uts’ilo’ob xibalbaj” (Jardines de Xibalbaj), 2009; “Jelipe” (2010); “U kimil ah ch’ana’at” (La muerte del adivino) 2010; “Kaaltale’ ku xixkunsik u jel puksi’ik’alo’ob” (El alcohol también daña otros corazones) 2010. DE