Los empresarios agrupados en el Consejo Coordinador Empresarial y en el Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, sugieren, recomiendan, exhortan al gobierno Federal a que asegure la gobernabilidad democrática y el imperio de la ley en todos los rincones del país. Demandan que se convoque a un compromiso por el fortalecimiento institucional del Estado mexicano, con el consenso de los tres niveles y los tres Poderes de gobierno, los partidos, la sociedad civil y la iniciativa privada. En pocas palabras, quieren un Pacto por México contra la corrupción y la impunidad.

 

Urge iniciar un proceso de renovación de la vida pública en México para limpiar y reformar las instituciones. A favor de esto, existen principios compartidos, avances y la disposición para llevarlos a cabo. Los ejes de la carreta del Pacto por México contra la corrupción, la impunidad y anexas que exponen los empresarios, son:

 

Un sistema nacional contra la corrupción fuerte y efectivo: que articule esfuerzos; con recursos para prevenir y detectar a tiempo actos de corrupción; que asegure el castigo, con mecanismos seguros de denuncia y protección a testigos, y la recuperación de lo defraudado a la nación o a los particulares…

 

Asimismo, la promoción de un cambio en la cultura y la ética pública. Hay que contemplar a los tres órdenes de gobierno y a todos los factores que inciden en la corrupción, incluyendo los que existan en el sector empresarial y en la sociedad en general. El susodicho sistema es un blindaje indispensable para que las reformas económicas tengan éxito, y tiene que estar listo este año.

 

Hay que hacer, dicen los empresarios, un gran esfuerzo en materia de gobernabilidad democrática. En paralelo, se necesita una estrategia para blindar las elecciones del 2015 de la infiltración de delincuentes y corruptos. Los empresarios estamos listos para apoyar.

 

Emprender una revisión objetiva de los avances y rezagos, los aciertos y fallos de la estrategia y el sistema de seguridad pública vigentes, con objeto de reforzar lo que sea necesario. Sobre todo, es preciso renovar compromisos de todos los responsables y fortalecer la coordinación interinstitucional. ¡Urge tomar decisiones en temas como las policías municipales!

 

Generar una agenda de fortalecimiento institucional para consolidar el Estado de Derecho, que necesariamente debe incluir la reforma en las leyes y sobre todo en las prácticas del sistema de impartición de justicia.

 

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Fiel a su condición de “colaborador” del gobierno Federal, sin importar colores, Claudio X. González, presidente del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, apunta: “Es muy importante que hagamos un Pacto por México para el aspecto de seguridad; tengo la impresión y la confianza de que la administración actual del presidente Peña Nieto lo trae muy claro”. Los problemas de inseguridad “impiden que México vaya para adelante, por eso tenemos que actuar de forma decidida, porque no hay tiempo para que las cosas sucedan por sí solas”, recomendó.

 

Los observadores políticos objetivos e imparciales apuntan que es tan delirante la propuesta de los dueños del billete, que la mejor manera de empujarlos a que se enfrenten a su propia estulticia es diciéndoles: “¡Bravo, qué idea tan fregona!” Ahora nada más digan en qué consistirá el Pacto, quién tendría que firmarlo y cuáles serán las responsabilidades y las tareas de las partes abajo firmantes.

 

¿De verdad creen los señores del dinero que su brillante participación en la búsqueda de la seguridad agregaría algo a lo que no ha conseguido el supremo gobierno con el Ejército, la Marina, la Policía Federal, la Procuraduría General de la República, el CISEN y anexas?

 

No faltan los oportunistas que rápidamente se apuntan para el pacto. “Pienso que en este esfuerzo que yo comparto, y en el que enfaticé mucho durante mi Presidencia, de fortalecer las instituciones de seguridad y justicia, está una gran parte de la clave de este problema, es decir, pienso que es vital para el país que haya policías confiables, ministerios públicos confiables, jueces confiables que hagamos todos un esfuerzo para que se renueven estos cuerpos policiacos a todos los niveles de gobierno y que estén integrados por mexicanas y mexicanos que verdaderamente defiendan a los ciudadanos y no a los delincuentes”, dijo el ex presidente Felipe Calderón.

 

¡Cállate, chachalaca!, podría responderle Chente.