A pesar de la expectación que causa la revelación de algunas encuestas durante los procesos electorales, a los mexicanos poco les interesan dichos resultados.
La última encuesta de De las Heras Demotecnia revela que a los votantes tampoco les interesa conocer resultados previo a la jornada electoral, aunque sí reconocen la influencia de dichos ejercicios entre la población.
Ejemplo de lo anterior -según el ejercicio de la casa encuestadora que dirige Rodrigo Galván de las Heras-, en la elección federal de 2012, cuando se renovó la Presidencia de la República, seis de cuatro consultados aseguran que no vieron ni escucharon los resultados de diversas consultas sobre preferencias electorales.
En la víspera de los comicios intermedios de 2015 y aunque algunos medios informativos ya difunden encuestas, ocho de cada 10 consultados sostienen que no han conocido ninguna de estas consultas.
Además, el 43% de los encuestados sostiene que le “interesa poco” conocer los resultados de ejercicios de preferencias electorales previo a cada jornada electoral, mientras que el 33% dijo que le “interesa mucho” y al 22% restante de plano “no le interesa” conocer los resultados.
No obstante esta apatía, según las respuestas de los consultados, seis de cada 10 mexicanos reconocen que las encuestas electorales sí influyen en el voto de la ciudadanía.
Lo anterior contrasta con la opinión del 62% de los consultados, que presume que los ejercicios de preferencia electoral son utilizadas como propaganda electoral, mientras que el 58% piensa que las casas encuestadoras manipulan las cifras para favorecer a un candidato.
En tanto, poco más de la mitad de los consultados reconoce que las encuestas son claras y fáciles de entender, y que ayudan a que las elecciones sean más transparentes.
Respecto a la evaluación de las casas encuestadoras, el 30% de la población las califica con 8 y 9, mientras que un 26% con 6 y 7 y 20% con calificaciones de 1 a 5, en las que cero sería Pésimo y 10 sería Excelente.
Finalmente, el 57% de los encuestados sostiene que para las elecciones de 2015 las casas encuestadoras van a hacer un mejor trabajo.
