AMSTERDAM. Y La Hiena rió al final. Cuatro años después Carlos Vela volvió a celebrar con el Tri, lo hizo con esa dramática metamorfosis que lo empezará a llevar entre la afición mexicana de villano a ídolo. Dos goles que al final fueron determinantes en el triunfo 3-2 de los verdes del Piojo Miguel Herrera en el Ámsterdam Arena ante una selección de Holanda que corroboró por qué está al borde de quedar marginado de la Euro 2015.
Partido explosivo, de lucimiento para las artillerías y de suplicio para las zagas. La exhibición de la artillería verde ilusiona: Vela y Chicharito, Chicharito y Vela, veloces y contundentes, sobre todo el de la Real Sociedad al que sólo le llevó ocho minutos demostrar que lo suyo es en el campo de juego y no frente a los micrófonos. Quién tendrá ahora algo qué reclamarle a Vela, quien se había negado a hablar con la prensa en las zonas mixtas del seleccionado tricolor y empezaba a acumular tensión entre los medios de comunicación; pero luego de sus tantos de ayer la voz de la afición le salvará de cualquier juicio.
Carlos Vela abrió el partido al minuto ocho, y fue una lata para la zaga naranja. El problema es que el cuadro bajo mexicano no fue diferente. Demasiados problemas para Diego Reyes, Adrián Aldrete y claro el zaguero Miguel Herrera; fue la cara de este nuevo Tri sin Carlos Salcido, Rafael Márquez, Héctor Moreno y Miguel Layún, demasiado titubeante en la zaga, donde hasta Guillermo Ochoa, borrado de la actividad con el Málaga, escupió un par de disparos que bien pudieron terminar con daño para la cabaña verde.
El empate para la Naranja Mecánica llegó en los botines de Wesley Sneijder, en el segundo lapso, como si no quisiera que se olvidara que en la Copa del Mundo también abrió el camino. La diferencia es que la contundencia en la artillería mexicana ahora sí estuvo presente gracias a Vela, quien repitió festejo sobre el minuto 62, y siete minutos más tarde, la que parecía la puntilla definitiva gracias a Javier Chicharito Hernández: 3-1 sobre Holanda en la Arena de Ámsterdam… ¡vaya que suena contundente!, más si se recuerda que los de naranja fueron terceros en la pasada Copa del Mundo, aunque sin olvidar, que hoy arrastran su prestigio con una gris problemática en su eliminatoria europea.
Y claro, el contundente marcador no podía terminar sin una dosis de sufrimiento para el Tricolor cuando Daley Blind disparó de fuera del área y el balón fue desviado por Diego Reyes lo suficiente para que Guillermo Ochoa no pudiera evitar el 3-2, que impulsó a los holandeses al frente, recargados, claro, en la habilidad de Robben, quien volvió loco a Aldrete, aunque nunca tuvo la claridad o la oportunidad, al menos, para lanzarse un clavado.
Triunfo verde aunque lejos del calificativo de revancha, aunque con la sonrisa grande y alargada de un Carlos Vela, de quien hoy todo mundo parece haber perdonado.
Con Vela y Chicharito, el Tricolor es letal
La asociación resulta casi milagrosa por inédita en la historia del futbol mexicano. Carlos Vela y Javier Hernández le dan a México posibilidades ofensivas que pocas selecciones en el mundo poseen. El Chícharo es un mago del desmarque, la contundencia y la oblicuidad, mientras que La Hiena o el Bombardero, como gusten decirle, resuelve desde fuera del área, desborda y es un extraordinario pasador.
Pero pese a talento de los dos jugadores, han alineados juntos sólo en ocho partidos en los últimos cuatro años. En esos duelos han enfrentado a potencias futbolísticas y han salido airosos con la única excepción del encuentro preparatorio en Wembley antes del Mundial de 2010, en donde los ingleses se impusieron 3-1.
La historia comenzó en marzo de 2010, cuando Javier Aguirre se animó a poner a jugar a los dos jóvenes que apenas rebasaban los 20 años. Fue más que significativo el momento y el rival. Ante Nueva Zelanda en un amistoso, y Vela entró en lugar de Cuauhtémoc Blanco, mientras que Hernández lo hizo en el sitio de Aldo de Nigris. Y en menos de 10 minutos resolvieron con goles el duelo, que terminó 2-0.
Pocas veces, sólo cinco, han iniciado los dos jugando para México, pero cuando lo han hecho, México ha tenido buenos resultados. Ocurrió contra Gambia (5-1 en 2010 con dos goles de Hernández), contra Italia, cuando México vapuleó al campeón del mundo vigente y lo venció por 2-1 con un gol de Vela, y en el empate 1-1 ante el flamante campeón del mundo, España, con gol de Hernández.
La única derrota de la dupla jugando de inicio ha sido un accidente ante Ecuador, en el que ninguno anotó.
Así que con sus dos atacantes estelares, México ha logrado victorias importantes, a la que se suma ahora Holanda con su cuadro de lujo en su casa, con goles de ambos.