NACIONES UNIDAS. El Consejo de Seguridad de la ONU condenó hoy los asesinatos “vergonzosos y cobardes” del estadunidense Peter Kassig y de al menos otros quince rehenes sirios a manos del Estado Islámico (EI).
El máximo órgano de decisión de las Naciones Unidas, en una declaración por escrito, trasladó sus condolencias a las familias de las víctimas y a sus países de origen.
“Estos crímenes vuelven a demostrar una vez más la brutalidad del EI, que es responsable de miles de abusos contra los pueblos sirio e iraquí”, señaló el Consejo.
En el caso de Kassig, señaló que su muerte es “un trágico recordatorio” de los crecientes peligros que el personal humanitario se encuentra en Siria.
En ese sentido, los miembros del Consejo recordaron a todas las partes en conflicto la obligación de proteger a los cooperantes.
Además, como hizo en anteriores asesinatos por parte del EI, el Consejo reiteró que este tipo de actos no intimidan a la comunidad internacional, sino que refuerzan su decisión de combatir al grupo yihadista.
Según el órgano de la ONU, el EI “debe ser derrotado y la intolerancia, violencia y odio que abraza deben ser eliminados”.
Además, el Consejo subrayó la necesidad de llevar a los responsables de esas atrocidades ante la Justicia y urgió a todos los países a cooperar para ello.
El EI anunció el pasado domingo la muerte de Kassig, de 26 años, y que se convirtió en el tercer estadunidense decapitado por el grupo.
Los yihadistas difundieron un vídeo en el que se muestra además la decapitación de una veintena de soldados sirios, cuya autenticidad fue verificada por la Casa Blanca. DE