La petición para extraditar Alfredo Beltrán Leyva se realizó con base en las labores de inteligencia del gobierno norteamericano sobre las actividades delictivas de El Mochomo en aquel país, inclusive se estableció que seguía operando desde el penal de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco para enviar drogas a Estados Unidos y comprar armas.

 

Dos testigos protegidos detallaron cómo daba órdenes desde prisión tales como la compra de armas de alto poder, y explicaron que le compraba cocaína a cárteles de Colombia quienes entregaban los paquetes en altamar y que la droga llegaba a EU mediante “mulas”.

 

En el amparo 157/2014, del Segundo Tribunal Colegiado presentado por Beltrán Leyva en contra su traslado, también se adjuntó la solicitud de extradición de Estados Unidos al gobierno mexicano, donde se le acusa de diversas conductas delictivas en contra de la soberanía de ese país.

 

Las investigaciones fueron realizadas por elementos de la Administración para el Control de Drogas (Drug Enforcement Administration, DEA por sus siglas en Inglés) y de la Oficina Federal de Investigación (Federal Bureau of Investigation, FBI).

 

También se usaron las declaraciones de dos testigos colaboradores, quienes formaron parte del Cártel de los Beltrán Leyva, y la intervención de llamadas “legalmente grabadas”, donde presuntamente se realizaban y ordenaban operaciones de trasiego y distribución de droga de México a la Unión Americana.

 

Cabe destacar que en la versión pública de la sentencia se omitió el nombre del quejoso, pero el expediente de origen 1270/2013 del Juzgado Cuarto de Amparo fue presentado por Alfredo Beltrán Leyva; en este caso el nombre del extraditado es sustituido con asteriscos.

 

“…aunque las autoridades de orden público habían capturado a ****** (Alfredo Beltrán Leyva) en enero de 2008, éste seguía dando órdenes aun mientras se encontraba encarcelado, y seguía participando en la distribución de drogas de México a los Estados Unidos”, informó el agente especial Boyd del FBI.

 

En su declaración, el agente especial Boyd explicó sobre una la simulación de transacción que un testigo colaborador del gobierno de Estados Unidos intentó hacer con un operador de los Beltrán Leyva por 2.8 toneladas de mariguana.

 

Dicho testigo colaborador reveló a las autoridades norteamericanas que al parecer El Mochomo seguía dando órdenes desde el penal federal de Puente Grande Jalisco, donde estaba preso.

 

“El Testigo Dos escuchó una conversación (de la persona con la que negociaba) quien comentó que las órdenes que le daban venían directamente de ******. Aconteció esta conversación en el verano de 2011, más de tres años después de la captura de *****”, dice de manera textual en el expediente.

 

El Mochomo comparecerá este viernes ante la citada corte para responder por ilícitos relacionadas con el tráfico de drogas (mariguana, cocaína y metanfetaminas), entre otros.

 

“En su declaración, el Agente Especial Boyd hace un resumen de la investigación de las actividades narcotraficantes de ****** y las pruebas que dieron lugar a la acusación en esta causa”.

 

“Adjunto a la declaración jurada del Agente Especial Boyd, incorporados como parte de esta solicitud de extradición están los informes de laboratorio que describen el análisis químico de la metanfetaminas…; transliteraciones de varias conversaciones telefónicas legalmente “grabadas en las que el empleado de ******, ******, y sus co-conspiradores hablaron sobre narcoactividades y la compra de armas…”, dice de manera textual parte del expediente.

 

 

Recibía droga de Colombia

 

En el expediente se omiten los nombres de los testigos colaboradores que identificaron al inculpado a través de audios de llamadas telefónicas y fotografías, y que afirmaron que El Mochomo les daba órdenes para las operaciones delictivas en EU, así como la compra de armamento de alto poder.

 

Asimismo, se explicó que cárteles colombianos eran los que suministraban cocaína a Beltrán Leyva; la entregaban en altamar y luego en cargamentos de 1.6 a 2.3 toneladas, posteriormente la droga era llevada en lanchas rápidas al territorio mexicano para luego continuar su camino a Estados Unidos a través de “mulas”.

 

El Departamento de Justicia de Estados Unidos dijo que la acusación contra El Mochomo se formalizó el 24 de agosto de 2012, por asociación delictuosa con fines de distribuir sustancias controladas.

 

“Específicamente 5 kilogramos o más de cocaína, 50 gramos o más de metanfetamina, un kilogramo o más de heroína, y mil kilogramos o más de marihuana, sabiendo y pretendiendo que dichas sustancias controladas serían importadas ilícitamente a Estados Unidos”.

 

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