OAXACA. Gustavo Adolfo López Ortega, maestro de la Sección 22 afiliado a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) informó a la prensa local que pidió asilo político a Cuba, Venezuela y países de la Unión Europea, luego que se hiciera público un documento del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) que lo vincula con la guerrilla del Ejército Popular Revolucionario (EPR).
Un periódico local de Oaxaca difundió que el profesor aseguró que tanto la Procuraduría General de la República (PGR) como la del Estado determinaron que no lo están investigando.
De acuerdo con varios documentos, la CNTE está integrada por varias secciones, muchas de ellas radicales y ligadas al EPR. Varios de sus militantes están relacionados con distintos delitos. Incluso, hay algunos en la cárcel acusados de secuestro.
Otra de las expresiones radicales de la Coordinadora es la Unión de Trabajadores de la Educación, cuyas cabezas son Rogelio Garfias Vargas, Selvis Núñez Cabrera y María del Carmen, alias Carmen Jicayán.
También está el Frente Amplio de Lucha, ligado a la APPO. Sus cabezas son Gustavo Adolfo López Ortega, alias El Chivo, Claudio Flores Osorio y Rodrigo Flores Peñaloza, quien ha organizado las movilizaciones en el Istmo de Tehuantepec contra las empresas eólicas.
Otro dirigente está refugiado en Europa
Juan Sosa Maldonado, dirigente de la Organización de Pueblos Indígenas Zapotecos (OPIZ), encarcelado en la década de los 90 por supuestamente pertenecer al Ejército Popular Revolucionario (EPR), se encuentra refugiado junto con su familia en un país de la Unión Europa, ante el atentado sufrido el año pasado.
El también defensor de los derechos ligado a la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) explicó que está en el extranjero al lado de su esposa Leonor Jiménez Castellanos bajo la protección de la Sección Española de Amnistía Internacional (AI). DM