El presunto grupo anarquista autodenominado “Reacción Salvaje” (RS) reconoció en un comunicado su participación en los disturbios y ataques frente a Palacio Nacional durante la marcha del pasado 20 de noviembre, así como su forma de actuar infiltrándose en las últimas movilizaciones sociales por el caso Ayotzinapa.
Este grupo, como 24 HORAS publicó en septiembre, había anunciado su aparición amenazando con cometer diversos hechos de violencia y actos terroristas en contra del Estado.
“ (…) terminado el mitin en el zócalo capitalino por los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, Guerrero, algunos grupúsculos de Reacción Salvaje (RS) decidimos irrumpir y romper con la marcada línea de paz (…) Fue así que contribuimos a los disturbios desatados frente a Palacio Nacional, símbolo y bastión de aquellos que deciden por sobre el individuo”, señalaron en su comunicado.
RS no expresó interés alguno por el tema de los desaparecidos en Ayotzinapa sino que insistieron que sus acciones son en contra de lo que denominan un estado “tecnoindustrial” que atenta en contra de la naturaleza.
El grupo hizo hincapié en que el descontento social que se vive por los hechos de violencia en el país, y que han derivado en múltiples movilizaciones, han generado lo que refieren como “condiciones totalmente útiles para incrementar las tensiones”, provocar a las fuerzas del orden y generar desestabilización.
Sostienen que su forma de actuación en estos eventos ha sido de forma “camuflada” dentro de contingentes con actitud pacífica.
Cabe señalar que aunque la participación de encapuchados ha sido frecuente en varias marchas y disturbios de los últimos días, RS es el único grupo anarquista que ha reivindicado su participación en hechos de violencia. No obstante, este mismo grupo sostuvo en su comunicado que hay otras organizaciones radicales y de tipo “guerrillero” actuando en los incidentes que se han presentado en el país en las últimas semanas.
El 15 de noviembre pasado la guerrilla “Milicias Unidas” emitió un comunicado en el que reconoció su responsabilidad en una explosión ocurrida en la zona de Aragón, Estado de México, aunque el gobierno estatal subrayó que se había tratado de un atentado
Células y atentados
Según lo que ha dicho RS en varios comunicados difundidos, todos ellos en el portal internacional de difusión de grupos anarquistas Contra Info, no tiene una conformación homogénea, sino que está distribuido en células operativas que ellos autodenominan “grupúsculos terroristas”.
Entre esas células se encuentran por ejemplo “A sangre y fuego” y “Danza de Guerra” que son las que reivindicaron los incidentes ocurridos en el Zócalo del pasado 20 de noviembre.
Otras células de RS han emitido entre octubre y noviembre por lo menos cinco comunicados en donde reivindican diversas amenazas o ataques de los que se ha conocido poco públicamente, la mayoría en el centro del país. Entre ellos está por ejemplo una amenaza de bomba en el 9no Encuentro Nacional de Biotecnología en Tlaxcala, o un ataque con objetos incendiarios en instalaciones de Cemex en Tlalnepantla.
Posible acción coordinada
El Gabinete de seguridad del país y sus órganos de inteligencia indagan la participación de varios grupos, entre ellos RS, en la generación de disturbios ocurridos en distintas partes del país en las últimas semanas, sin que hasta ahora se tenga identificado a uno en específico.
Autoridades federales señalaron que se analiza la posibilidad de una acción concertada o coordinada en varios de los incidentes, como por ejemplo el ataque a la puerta de Palacio Nacional y lo ocurrido el 20 de noviembre pasado, y en los que podrían estar involucrados uno o varios grupos radicales. Para ello también se intercambia información con las procuradurías de varios estados.
Esta línea de investigación hasta ahora no ha llegado a una conclusión. Las personas que resultaron detenidas en eventos pasados fueron acusadas de varios delitos en flagrancia por la Procuraduría General de la República así como la del DF, pero no se pudo identificar que pertenezcan a algún grupo en específico.
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