Integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del estado de Guerrero (UPOEG) dejaron entrever la posibilidad de que la mayoría de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos en Iguala estarían con vida y bajo la explotación de la delincuencia organizada para la siembra de enervantes.
“Tenemos la esperanza, no el 100% pero un 85%, de que los muchachos están vivos. Hemos tenido información directa, la inteligencia comunitaria es muy grande; si los llegaran a matar sería después de esto. Nosotros sabemos a quiénes ya los mataron, porque de antemano sabemos que hay gente que se defiende”, declaró ayer Crisóforo García Rodríguez, coordinador de la UPOEG, y uno de quienes encabeza las labores de búsqueda de los normalistas.
Según la información revelada por el líder comunitario, habrían sido pobladores de Iguala y otras alcaldías cercanas quienes les dieron los datos, en contraste con las versiones que ha vertido la PGR a partir de las declaraciones de sospechosos detenidos, que han dicho que los jóvenes fueron asesinados y quemados sin dejar evidencia de sus cadáveres.
De los restos humanos hallados en fosas clandestinas a la fecha ninguno ha sido identificado con los normalistas.
Cuestionado por este diario sobre dicha versión, el también coordinador de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio, indicó que las declaraciones de su compañero son en razón de la información que han recibido, pero no quiso pronunciarse a detalles argumentado “cuestiones de seguridad”.
“Es contraproducente dar detalles de esa situación, es delicado porque hay que ver por la seguridad de los jóvenes”, dijo a 24 HORAS el líder comunitario.
El martes pasado, Plácido Valerio anunció la conformación de comités de desaparecidos en todos los municipios. Luego de que según cálculos de la UPOEG son alrededor de 500 personas desaparecidas en la región de la Costa Chica, el centro del estado, e Iguala. Con base a los registros de fosas, cadáveres y restos humanos hallados en los últimos dos meses.
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