Fotos: Jesús Villaseca | 24 HORAS
Sergio Mayer ha logrado lo que pocos actores en el cine mexicano: interpretar al Presidente de la República en una cinta que ha sido vista por más de cuatro millones de personas durante los casi dos meses que lleva de exhibición en la cartelera: La Dictadura Perfecta, de Luis Estrada.
Con más de 183 millones de pesos acumulados en taquilla, el filme de Estrada ha causado controversia tanto por su temática como por las similitudes del Presidente que presenta en su historia con el actual mandatario, aunque para Mayer, quien platicó en exclusiva con 24 HORAS, esto no es así.
¿Qué representa para ti la figura presidencial?
Yo tengo para cualquier Presidente mucho respeto y admiración, me parece que es un trabajo realmente interesante. Es muy fácil decir y criticar cuando está uno detrás de la trinchera. Todos los políticos y los artistas estamos expuestos a la crítica en general. Y más los políticos, pero ahora que he estado metido en el activismo social te das cuenta de lo laborioso que es, de lo complicado y de la responsabilidad que implica ser un funcionario público. Tengo mucho respeto y admiración hacia la envergadura presidencial, hacia las instituciones. Creo que una cosa es tener la libertad de expresar y otra es llegar al libertinaje y a la falta de respeto. Es válido expresar tu punto de vista y expresarlo, porque vivimos en un país libre, democrático, con tolerancia. El estado en el que vivimos me parece que ha logrado esa apertura, esa libertad.
¿En quién te basaste para dar vida al Presidente en el filme?
Tuve mucha suerte de que Luis (Estrada) haya visualizado a un Presidente con ciertas características físicas y que se apegaba mucho a mí, porque bien pudo haber imaginado a un Presidente de botas y alto, o a uno pelón o como sea.
¿Definitivamente no es el actual presidente?
Realicé un trabajo profesional donde me pidieron que interpretara a un personaje en base a ciertas características. No me basé en nadie, sino simplemente en lo que me pidió el director. Me fui sobre los textos, sobre la dirección escénica del director y demás. Ese es el trabajo del actor. Yo soy un activista social, más que nada, no soy parte del activismo político, ni siquiera Estrada, quien simplemente retrata en sus películas ese tipo de historias y las maneja muy bien.
¿Qué opinas de la reacción que ha generado La Dictadura Perfecta?
La película ha generado diferente tipo de reacciones, en la que cada quien tiene su apreciación y eso la hace interesante. Generó polémica por la coyuntura que se está dando en el país, pero creo que es una película atemporal. Si hubiera salido hace 10 años hubiera estado actual, y si la ves dentro de 10 años seguramente será lo mismo. Esa es una de las virtudes de Luis Estrada, que siempre ha tenido la visión para retratar de forma sarcástica e irónica la situación social, política y económica de México.
¿Crees que es malo criticar a la autoridad?
Si están en esos puestos están expuestos a eso, pero vuelvo a lo mismo. No sólo es cargarles la mano. Si están ahí tienen que aguantar y apechugar, pero no se trata de cargarles la mano porque sí. Lo que sí es que hemos caído en un momento de ingobernabilidad y eso es triste. Lo que yo veo es que las autoridades no quieren realizar su trabajo como instituciones, especialmente las de seguridad, principalmente porque Derechos Humanos o los medios de comunicación se les van a la yugular. Es increíble de verdad que o se van a la ingobernabilidad y entramos en un estado de anarquía, o se van como lo que pasó en Ayotzinapa, donde mandas a desaparecer estudiantes. Entonces me parece triste y lamentable.
¿Consideras justo que se le ‘cargue la mano’ al gobierno?
Estoy convencido de que los ciudadanos tenemos una corresponsabilidad con la situación del país, con el gobierno, con todo. No podemos dejar todo a papá gobierno y que nos solucione todo. Eso es triste y lamentable. Si no nos ponemos la pilas como ciudadanos, involucrándonos en un sistema democrático donde podamos aportar, ser propositivos en vez de negativos, vamos a seguir con esta situación.
Nos da miedo involucrarnos en política pero sí criticamos. Desde fuera todos somos muy conocedores de todo, de futbol, de política, todos opinamos, todos decimos, pero nadie da propuestas, nadie se involucra. Como ciudadanos tenemos que comprometernos desde la casa, desde cómo la llevas, si reciclas, si cuidas la naturaleza, si no tiras basura en la calle… nosotros somos los que propiciamos la corrupción. Somos parte de ella, pero también somos parte de la solución.
En este sentido, ¿qué tanto poder tienen las televisoras?
No tanto las televisoras, hay que reconocer que los medios de comunicación son el cuarto poder, esa es la realidad. La televisión llega a más lugares y es más popular, y de que tiene influencia definitivamente la tiene, por eso hay que tener cuidado con la información que se presenta. En un país democrático debe haber medios que sean de izquierda, de derecha, parciales, imparciales. Es válido. Creo que los mexicanos tenemos el derecho a tener información de todas partes para poder juzgar y tener nuestro punto de vista.
Apoya a causas sociales
Más allá de su trabajo como actor, una de las labores que realiza Sergio Mayer y que mayores satisfacciones le ha dejado no tiene que ver con la actuación y no es tan conocida por el público en general: su activismo a favor de diversas causas sociales y humanitarias, principalmente aquellas que tienen que ver con los derechos de los niños y los animales.
De hecho, en su perfil de Twitter se presenta como vocero de los derechos de los niños en el Senado, vocero humanitario de Be Foundation y consejero de la Fundación Y Quien Habla Por Mi.
Has estado involucrado con diferentes fundaciones. Platícanos un poco de ello…
Gracias al trabajo que he estado haciendo con fundaciones como Y Quién Habla Por Mí y Be
Foundation, que habla del derecho a la identidad, hemos logrado involucrarnos en el Senado. Me hicieron el honor de nombrarme vocero de los derechos de los niños las senadoras Hilda Flores y Diva Gastelum, que son presidentas de Grupos Vulnerables y de Igualdad de Género, respectivamente. También he colaborado con Angélica de la Peña, presidenta de Derechos Humanos, y con ellas hacemos mesas de trabajo.
¿Has tenido logros?
Ahora que salió la ley preferente con respecto a los derechos de los niños colaboramos fuertemente en el Senado para ese proyecto. Logramos presentar una iniciativa de ley antes de todo esto donde se modificara el Artículo 4 a la Constitución para que los niños tengan derecho a la identidad. Hay más de 10 millones de niños en el país que no tienen un acta de nacimiento, y eso ocasiona que no tengan derecho a sus demás derechos, como lo son a la educación, a la salud, al bienestar. Si no tienes un acta de nacimiento no existes, eres un ciudadano invisible, no entras en los programas sociales y es muy lamentable.
También has abogado por los derechos de los animales…
En otra área, como Grupos Vulnerables, logramos meter el tema de los derechos de los animales, pues los seres humanos nos hemos dedicado a maltratar y ultrajar a los mismos de una forma de verdad fuera de contexto. Hemos logrado que 10, 11 estados hayan aprobado la ley de circo sin animales. Hemos demostrado que el maltrato animal tiene que ver con la descomposición social. Si enseñas a un niño a cuidar y a respetar una vida no humana, va a crecer con un respeto a la vida y hacia sus semejantes. Hay que inculcarles eso a los niños.
Y también apoyas a la Fundación MGAS…
Es una Fundación que se encarga de apoyar a niños con parálisis motriz, parálisis cerebral, y que una o dos veces trae al país a doctores de Rusia que tienen un procedimiento especial, único. Trabajamos para que puedan venir a operar a los niños y estamos logrando que a través de la Fundación Carlos Slim sean beneficiados con ello.
Hace poco iniciaste una campaña en Twitter para hablar de lo positivo de México. ¿Qué te llevó a ello?
La inicié precisamente por eso. Estoy plenamente convencido que como ciudadanos tenemos una corresponsabilidad. No vamos a tapar el sol con un dedo y es evidente que tenemos problemas económicos, sociales y políticos, sin embargo, nuestra responsabilidad como ciudadanos es hacer nuestro trabajo, y también hay cosas buenas y positivas de nuestro país, somos más la gente buena que la mala, y tenemos que resaltar las cosas positivas, hacer entender al resto de la ciudadanía que depende de nosotros que se logre cambiar este país. Mi idea es que utilicemos las redes sociales para cosas positivas. Se trata de decir: “Ok, no estoy de acuerdo en esto, pero propongo esto otro”. Soy de la idea de que si a mí no me gusta como barriste la calle, voy y la barro yo. Si no me gusta lo que están haciendo mis autoridades, algo tengo que hacer, me tengo que involucrar, desde la casa, la colonia.
¿Y has recibido el apoyo de figuras públicas?
Estoy tratando de involucrar a varios compañeros actores, pues se tiene la idea de que no nos involucramos en estas cosas. Eugenio Derbez, por ejemplo, me ayudó mucho para el asunto de los circos sin animales. Creo que es el momento en que los actores políticos, sociales, nos involucremos en temas como el bullying, y una gran cantidad de cosas. No podemos dejar todo a los políticos.
El peligro de las redes sociales
Con más de 66 mil seguidores en Twitter, Sergio Mayer sabe del impacto e influencia que pueden tener las redes sociales en las personas. Sabe que el crecimiento de las mismas ha sido exponencial, pero también ve un peligro en las mismas si no se utilizan para cosas positivas.
“Hay que reconocer y aceptar que las redes sociales y la tecnología últimamente te dan pie a poder criticar y expresarte, a tener información al momento y dar a conocerla al mundo de inmediato. Eso es un hecho y es algo a lo que nos tenemos que adaptar. Y también sé que en un país con democracia tiene que haber esa libertad de expresar lo que quieres y sientes a través de cualquier medio”, expresa el actor, quien reconoce que esa libertad se exacerba a través de las mismas.
“Las redes sociales han provocado todo esto. Hay muchas personas que se escudan detrás de un meme o un tuit, en el anonimato, y piensan que esto les da la libertad de agredirte. Esa libertad de expresión la usan para burlarse, para agredirte, para bullearte, y es muy lamentable. Creo que las redes sociales crecieron muy rápido y no hemos sabido aprovecharlas en forma positiva. Es lamentable que haya grupos que se dedican a eso, a criticar, a burlarse, a faltar al respeto, pero sin aportar nada positivo. Hay que proponer, no nada más criticar”, asevera de manera tajante.
Y es que para Mayer, los hechos recientes de violencia en el país no tienen justificación, pues aunque señala que debe haber libertad para expresarse, ésta se debe hacer con mesura.
“Hay que tener libertad de expresión, pero hay que hacerlo de manera responsable, con cierta mesura, porque te expresas pero hemos llegado a estados de violencia y entras en la anarquía, donde puedes pintar, ultrajar, meterte a las instituciones, quemar lugares privados, autos, documentos y nadie hace nada. Está perfecto que te expreses y que hagas una manifestación, pero en el momento en que violes el derecho de otra persona, o su integridad, o la propiedad privada, hay que actuar como autoridad. No puedes romper el estado de derecho de todos los demás”.