NUEVA DELHI. Trece miembros de las Fuerzas de Seguridad, entre ellos dos oficiales, murieron en una emboscada de guerrilleros maoístas en Chhattisgardh, en el centro de la India.

 

Los fallecidos pertenecían a la Fuerza Policial Central de Reserva (CRPF, en inglés) y el ataque se produjo en el distrito de Sukma, dijo el director general adjunto de la Policía, R.K. Vij, a la agencia local IANS.

 

La emboscada tuvo lugar en la zona de Chintagufa cuando los miembros de las Fuerzas de Seguridad regresaban de una operación de búsqueda de guerrilleros y los insurgentes abrieron fuego de forma indiscriminada, aseguró otro vocero policial al mismo medio.

 

En marzo, quince policías y un civil murieron en una emboscada tendida por unos 300 guerrilleros maoístas a un convoy de las Fuerzas de Seguridad también en el estado de Chhattisgarh.

 

La guerrilla maoísta y sus diferentes facciones tienen sus bastiones en el llamado “cinturón rojo” del centro y el este de la India, donde cuentan con campos de entrenamiento.

 

La formación comunista está activa en al menos doce regiones y más de un tercio de los distritos de la India, aunque supone una amenaza grave en poco más del 10 por ciento de ellos.

 

El Gobierno de la India ha declarado a los rebeldes maoístas como la principal amenaza para la seguridad interna.

 

Según un informe presentado recientemente en el Senado indio, 1,922 personas han muerto en los últimos tres años por la violencia maoísta, entre ellos 1,179 civiles, 432 miembros de las fuerzas de seguridad y 311 guerrilleros.