OAXACA. Apenas dos datos de entre miles para entender la protesta social en Oaxaca:
En las paredes de cantera verde de la iglesia de Santo Domingo -de fama mundial- los maestros y estudiantes pintaron consignas con pintura que no se quita. Los maestros, alejados de los pizarrones porque andan más en marchas que en clases, han pintarrajeado el Centro Histórico que es Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.
En el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Oaxaca, que es zona federal por lo que la vigilancia le corresponde a la PF, los maestros y estudiantes pintaron en las paredes una consigna: “todo el poder al pueblo”.
Lo malo de la cobertura periodística de las protestas en Oaxaca radica sólo en la difusión de los gritos o los cierres de vialidad. Pero detrás de la protesta hay una estrategia de desestabilización con características singulares:
1.- Para regular el conflicto en Oaxaca no hace falta criminalizar la protesta social ni emplear el código penal, sino aplicar la Ley Federal del Trabajo porque los maestros son empleados públicos, cobran salarios del dinero de los contribuyentes y deben de acatar la obligación laboral de dar clases y cumplir horas de trabajo.
2.- Los maestros de la 22 tienen una agenda: que el gobierno les otorgue la autonomía en la definición de planes de estudio y salarios sin límite. Es decir, que el gobierno cumpla su función de patrón sólo pagando salarios pero sin meterse siquiera en vigilar cumplimiento de horas de trabajo. Ninguna empresa privada aceptaría unos trabajadores como los maestros.
3.- Los grupos organizadores de las marchas y plantones son la Sección 22 de maestros y algunas organizaciones radicales que quieren revivir a la Alianza Popular del Pueblo de Oaxaca que provocó el colapso de 2006 cuando quiso instaurar un gobierno popular, autogestionario y autónomo.
4.- La toma de casetas de autopistas es una forma de extorsión ilegal propia del crimen organizado. Cada automovilista tiene que pagar 50 pesos para “la causa revolucionaria” o no pasa. Por tanto, no hay nada de solidaridad o lágrimas por los desaparecidos.
5.- Los maestros exigen con paros, toma de empresas privadas, cierre de carreteras, asaltos y quemas de oficinas públicas y marchas sin fin, que el Congreso estatal apruebe sin discutir la iniciativa de ley de educación de la Sección que el gobernador Gabino Cué presentó como intendente de los asuntos de la Sección 22. Si el Congreso la aprueba, el gobierno federal la echará abajo vía controversia constitucional.
6.- Las acciones “revolucionarias” de los maestros implican daños a propiedad privada y daños a las vías generales de comunicación, las dos penalizadas por las leyes. Hay indicios de que algunas empresas van a cerrar sus puertas para irse a otros estados. Una empresa productora de mezcal tuvo que construir un almacén distante a su planta para eludir los plantones y tomas de carreteras.
Oaxaca vive, literalmente, una anarquía, es decir, una ausencia de jefe político estatal; el gobernador Cué es un empleado de la Sección 22 y no el representante de todos los oaxaqueños. Por eso para la elección de gobernador del 2016 perfila ya de nueva cuenta el PRI porque el PAN y el PRD apoyan a Cué y se han olvidado de los ciudadanos.