Senadores del PAN y del PRD vislumbran que difícilmente sea aprobada antes de que concluya el año la reforma a los artículos 21, 73, 104, 105, 115, 116 y 123 constitucionales, enviada por el presidente Enrique Peña Nieto, para replantear el modelo de seguridad pública y establecer un nuevo sistema policial.
Pese al acuerdo alcanzado el pasado lunes por los coordinadores de las tres principales fuerzas políticas representadas en el Congreso –PRI, PAN y PRD– de intensificar trabajos en el transcurso de estos días para desahogar antes del cierre del periodo (15 de diciembre) aquellos puntos del proyecto en los que hubiera consenso, los senadores Roberto Gil Zuarth (PAN) y Alejandro Encinas Rodríguez (PRD) confirmaron que la reforma a siete artículos de la Constitución no puede ser procesada con “prisas”, por lo que el tema será discutido ampliamente y en el tiempo que sea requerido.
A 11 días de concluir el periodo ordinario de sesiones, el perredista Alejandro Encinas, presidente de la Comisión de Estudios Legislativos Segunda –una de las comisiones encargadas de dictaminar el proyecto– aseveró que no hay condiciones para que la propuesta del presidente sea aprobada en lo inmediato.
“Vamos a establecer todo un procedimiento para hacer el análisis y proceder al dictamen. No se trata simple y llanamente de iniciar una discusión”, apuntó.
El senador perredista agregó que, incluso, se está perfilando la realización de audiencias públicas, en las que representantes de gobiernos municipales, estatales y especialistas en derecho constitucional analicen y discutan con senadores el contenido de la citada iniciativa de reforma, hecho que aplazaría el trámite de este asunto.
Cuestionado sobre la posibilidad de que la propuesta del Ejecutivo federal sea resuelta entonces en un periodo extraordinario, el legislador Encinas puntualizó que “si hay acuerdo en un procedimiento, se calendarizarán las fechas, pero no creo que simple y llanamente se reúnan las comisiones para discutir un proyecto de dictamen, toda vez que es un tema de cambios profundos que implica una redefinición de país”.
En el mismo sentido se expresó el panista Roberto Gil Zuarth, presidente de la comisión de Justicia (comisión que también tiene la tarea de procesar el documento), al advertir que no se legislará de manera apresurada el proyecto presidencial, sobre todo cuando su bancada considera que esta iniciativa es limitada, insuficiente e incorrecta en muchos de sus apartados.
“No por razones de prisa vamos a construir un modelo que es absolutamente irreversible y sobre todo perjudicial para el país, tenemos que pensar y sopesar muy bien cada una de las decisiones que vamos a tomar (…) en el tiempo que le tome al Congreso”, asentó.
A pregunta expresa sobre cuál sería el tiempo conveniente para procesar esta reforma, el senador Gil Zuarth enfatizó que “el tiempo es el que se invierta, el que dure, el que lleve los consensos políticos, los consensos y los buenos modelos, los buenos diagnósticos. Las buenas soluciones son los que definen los tiempos”.
“Contrapropuestas”
La falta de condiciones para procesar este primer paquete de reformas constitucionales se agrava una vez que PAN y PRD, anunciaron que presentarán sendas “contrapropuestas” a las anunciadas el pasado jueves 27 de noviembre por el mandatario federal.
Encinas Rodríguez anunció que su grupo parlamentario presentará en próximos días un contradecálogo, a través del cual se propondrá la redefinición de los cuerpos policiacos en todos los niveles, mientras Gil Zuarth especificó que el PAN también tiene una propuesta para que desde la Federación se puedan intervenir gobiernos estatales, no solo municipios.